Oscuro Deseo. [PAUSADA]

Capítulo 16.

BETANIA.

Pasado.

-Estás hermosa -dice dando un paso adelante y retrocedo por inercia.

-No me toques... Ni siquiera te me acerques... -titubeo con el nudo en la garganta y con el sentimiento de tenerlo en frente luego de casi dos meses sin verlo.

-Volviste a mí, tal y como siempre lo supe. Somos inevitable Betania, lo sabes, estamos destinados y no hay nada que puedas hacer contra eso.

-Heriste a mi hermana, encerraste a dos colegas que me ayudaron y maltratas a dos de mis únicas amigas que tuve aquí en el palacio, ¿Qué esperabas que hiciera? ¿Ver cómo se deterioran cada vez más por mi culpa?

-No me dejaste más alternativa que esa, Betania. Tú quisiste esto así no yo, sabes que mi plan era que fueras feliz, a mi lado siempre, sin embarg..

-¡Querías esclavizarme! ¡Querías usarme, usar mi poder para tu bien, para tú plan de dividir Levka y Freder por la mitad! -lo interrumpo y se acerca- Vas a terminar con la vida de muchas personas, de niños, de mujeres, de ancianos, y ni siquiera te importa en lo más mínimo...

-Cierto, ese es mi plan, siempre lo fue desde antes que nacieras Betania, Freder es un riesgo para nosotros, para los Maleficae, Levka necesita un líder y necesita paz de los cazadores. Yo seré ese líder -suelta y siento lástima por él.

-Te di mi corazón, te di mi confianza, te di todo de mí. Me usaste, me heriste y me humillaste... -sollozo y su rostro se tensa- Pero está vez, te juro por toda Levka, que no volverás a humillarme de ese modo. Mejoré, en muchos aspectos, ya no me tiemblan las manos ante tí y yo ya no te temo una mierda.

-Jamás quise que me temieras Betania, mi plan siempre fue el mismo, no me importó a quien dañaría en el camino. Quiero salvar el país -toma mis manos y siento la electricidad en ambos- Quiero que salvemos juntos el linaje de los brujos, vivir en paz y sin la necesidad de escondernos de los cazadores y recurrir a los últimos recursos de cada uno. Juntos podremos hacerlo.

-Debiste haberme dejado en paz si no era lo que querías -suelto en apenas un hilo de voz.

-Tienes que entender que solo quiero que estés a salvo, yo no quiero que te suceda nada malo. Y no puedes molestarte o no hablarme porque quiero que estés bien. Eres lo mejor que me ha pasado en mucho tiempo, y no quiero que nada malo te suceda..

-Tú eres lo malo que me ha pasado. Tú me lastimaste, tú eres el mal que me hace sentir fatal. Tú y nadie más que tú -limpio con rudeza las lágrima que se deslizan por mi mejilla.

-Somos destructivos y complicados, pero es real Betania. Somos reales -dice con un hilo de voz y con ojos brillantes.

-Y muy malos el uno para el otro, ¿Olvidaste esa parte?

-Pero te necesito conmigo.

-Nuestra historia terminó, Aleksander..

-Nuestra historia está a punto de comenzar, Betania -susurra con posesión, haciéndome estremecer.

Se voltea, tomando la pequeña caja que yace sobre la maqueta del territorio de Levka, para luego posarse frente a mí.

La abre, enseñándome el reluciente collar del sol y la luna que me obsequió el día de la fiesta de fin año, justo cuando supe que nunca existió el linaje oscuro y que siempre fue él quien asesinó a tantas personas en siglos anteriores.

-Hay cosas que no puedes borrar y lo sabes -dice volteandome para colocarme el collar- Te extrañe más de lo que pensé que haría...

Susurra en mi oído y siento el escalofrío alojarse en mi cuerpo, haciéndome temblar cuando sus dedos fríos rozan mi clavícula.