Cap. 2

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-¿Listos?-pregunta August.

-Ya todos están listos y en sus posiciones-asegura Georgia.

-¿Bien, princesa sabes qué hacer? Si llegas a recordar donde están...

-Guio a un grupo hacia ahí, lo sé August. No soy una idiota.-contesto rodeando los ojos.-Y sabes que odio que me digas así.

No contesta y se dirige al frente del grupo junto con Georgia. Bufo por debajo acercándome a Adalid quien estaba cogiendo algunas frutas podridas como municiones.

-No traes puestos tus pupilentes-menciona mi amigo al verme,

-No. Me lastiman, ya veré luego que usaré para que no sepan que soy yo-"si es que llego a usar algo claro"- Sabes, hay veces que pienso que solo me rescataron para conseguir esos estúpidos libros.-Me cruzo de brazos situándome frente a él.

-Sabes que eso no es cierto.-Adalid me mira dejando de hacer lo que estaba haciendo y me abraza.-August solo está estresado. Quiere el bien del reino igual que todos. Y lo sabes.

-Sí. Y también sé que Maxon también quiere el bien de SU reino.

Suspira soltando el abrazo. Lo miro con los brazos cruzados. Sé que ellos piensan que mi hermano y el Rey no saben lo que hay fuera de esos muros -y tal vez tengan ranzón- pero no por eso tienen el derecho de ponerlos como unos imbéciles que no saben nada de su reino. Me refiero a que, vamos, desde pequeños los enseñaron a gobernar, estoy segura que lo pueden hacer hasta con los ojos cerrados...o al menos eso creo yo...bueno, solo de Maxon, claro.

-Bueno si estás de su lado, ¿Porque no vas a tu hogar el castillo?, princesa, y nos dejas trabajar en paz.

Hace un par de años, cuando ingresé a los rebeldes, eso me hubiera dolido. Pero ahora...bueno también, pero solo porque me lo dijo, el que se supone que es, mi mejor amigo.

-Creme Adalid, varias veces lo he pensado...-contesto fríamente.

-Bueno, y ¿Por qué no lo has hecho?-contesta cortante. Quien no lo conociera, diría que el brillo de sus ojos era de furia, pero ¿Yo?...yo sé que le está doliendo está conversación.

"Por ti, tonto". Miro hacia el grupo y este ya estaba listos para él ataque.

-Averígualo por tu cuenta.-me encamino al grupo. Sintiendo su mirada siguiendo mis pasos. August hace que todos se reúnan en un pequeño círculo para repasar el plan. Lo paso de alto, subo la azotea del edifico –estamos en un callejón oscuro cerca del palacio-me quedo en la orilla de esta y miro el imponente palacio.

Lo observo con atención y logro ver a mi hermano asomado por la ventana de su habitación acomodándose los botones de la manga. Se le veía nervioso y me atrevo a decir que confundido. Y como no. 32 Chicas llegaron hace como una semana al palacio para que el escogiera a solo una como su esposa, la princesa de Illéa y en un futuro, su reina...y claro mi cuñada. Aunque, por lo que tengo entendido y en lo que el primer Report de la Selección vi, ni siquiera 24hr pasaron y ya había sacado a 8.

Volteo a ver hacia el callejón. Todos volvían a sus posiciones mientras Adalid y August buscaban algo con la mirada un tanto desesperados, hasta que Adalid y yo cruzamos miradas. Veo como su cuerpo se destensa solo un poco. August mira a mi dirección y haciéndome una seña de que ya era hora. Respiro hondo para después bajarme de la azotea y acercarme a ellos.

-¿Todo listo?-pregunto caminando hacia mi posición, al frente del grupo junto con los dos antes nombrados.

-Sí, recuerden el plan, Prince....

-Vuelve me a decir princesa, August, o a decirme mi parte del plan y te rompo los de abajo.

-Que linda-susurra sarcástico.

T/N Schreave. La hija perdida de IlléaTempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang