Alabama, con misterios y oscuridad dando vueltas a su alrededor, caos en casa y superficialidad en su entorno.
Asher, con una familia extrañamente funcional, un pasado un poco turbio y con mas secretos de los que debería tener una persona como el...
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Las lagrimas caen por mis mejillas empapando toda mi visión, mezclándose con la sangre, el sudor, la lluvia y mi desesperación.
Me aferro con prisa e intensidad a su camiseta blanca ahora manchada por completo del color carmesí de su sangre resbalándose entre mis dedos y su cuerpo. Sollozo, grito y sufro de una manera en la que nunca antes lo había hecho, maldiciendo la hora y momento en que por mi mente paso el querer averiguar que ocurría, pero maldigo aun mas la hora en que él acepto solo y únicamente por hacerme feliz.
Es culpa mía y solo mía, podía quedarme en casa con mis hermanos mientras tomaba una taza de chocolate los días lluviosos y me aferraba a esos brazos que me hacían sentir segura con solo rodearme y ahora agonizan por mi curiosidad e impaciencia
Me castiga mi conciencia en cada minuto que pasa. Y lo se, se que tiene razón y solo puedo respirar profundo mientras pienso que hacer.
-Por favor Asher, por favor quédate a mi lado - Exclamo en medio de mis lagrimas y solo veo sus ojos azules que ahora gracias a la poca iluminación se ven más opacos y sin vida.
-Ally, no importa si no sobrevivo... - susurra tan suave que debo acercarme para entender sus palabras, las cuales queman en mi pecho. - Déjame aquí si es necesario para que estes a salvo - Termina la frase empeorando mi sufrimiento.
Le ruego que no cierre los ojos mientras sostengo su cabeza en mis muslos, y busco desesperada el lugar de donde proviene la sangre para detenerla y ganar tiempo.
Logro identificar el camino, esta emana de una herida gigante entre su abdomen y costilla derecha. Maniobro y logro quitar mi suéter mojado por la tormenta, sigo las instrucciones que logré memorizar de mi hermano cuando realizó sus clases de primeros auxilios y detengo un poco la perdida de sangre.
Funciona y eso hace que mi respiración se controle un poco. Estamos al otro lado de la ciudad, en medio de una tormenta, sin señal y Asher a punto de desangrarse.
