Look At Me (看著我).

XIII

“Te ame más que a mi propia vida, pero tú solo me cambiaste”.

Tokyo Antiguo Sengoku.

Este episodio contendrá solamente el mundo antiguo, ya que se mostrará la vida de los Taisho, sin más comencemos.

Inuyasha corría hacía las tierras del Norte donde se encontraba Kōga, pues ahí se encontraba Mioga.
Aquel hanyō saltaba entre los árboles hasta llegar a la dona de los yokais lobo quienes lo intersectaron.

- ¡¿Qué es lo que buscas aquí príncipe de las tierras del Oeste?! - preguntó un lobo.

- Tks - musitó - No me digas así bastardo solo busco a su líder Kōga debo hablar con el -

- Síguenos - dijo.

Los yokais lobo llevaron a Inuyasha hasta su aldea donde lo llevaron junto a su líder.

- ¿Qué quieres aquí apestoso hanyō? - preguntó Kōga.

- Vine a buscar a Myōga - respondió serio.

- Ah, la pulga vieja creo que se encuentra en el territorio del Lord del Oeste - dijo.

- Jaken me dijo que estaba con ustedes - mencionó - Así que entrega me esa pulga y tal vez no te mate -

- ¿Acaso me estás amenazando? - preguntó serio.

- Tómalo como quieras sucio lobo - respondió.

Ambos iban a comenzar una pelea, hasta que Ayame salió con Myōga para detener a ambos.

- Detente Inuyasha, aquí estoy - dijo nervioso.

- Ves que aquí estaba - dijo sonriendo.

- Lárgate ahora - dijo molestó.

Inuyasha tomo a Myōga y se fueron directo a la aldea donde Miroku, Sango, Kaede y Kikyō lo miraron extraño, pues había entrado a la casa de él y Kikyō.

- Ahora si Myōga, ¿Dime el pasado de Sesshomaru? - preguntó mirándolo.

- ¿Para que quieres saber eso Inuyasha? - preguntó Sango.

Inuyasha ignoró a Sango, pues quería respuestas.

- Eres un tonto Inuyasha, si Sesshomaru llega a saber que te dije su pasado me matará - respondió nervioso.

- Eso no pasará, pero dime - pidió.

Myōga iba a hablar, pero las puertas y ventanas de su casa habían sido cerradas bruscamente dejando a todos asustados, pues detrás del hanyō estaba apareciendo la figura de la demonesa más respetada en todas las tierras.

- Vaya que eres un hanyō muy entrometido - decía.

- Mi señora - dijo asustado Myōga.

Inuyasha solo se molestó al verla, pues para el su padre había sido el causante de que su madre muriera.

- Pero como veo que realmente tienes curiosidad te mostraré lo que quieres saber - dijo sonriendo.

Irasue extendió sus manos en volviendo a todos en una nube negra llevándolos a sus recuerdos.

Recuerdos de la familia Taisho.

El viento corría en un día de primavera y una joven yokai corría por los prados de flores sonriendo, pues amaba realmente las flores, sin embargo no se dio cuenta que alguien estaba frente a ella haciendo que ambos cayeran al suelo.