Capítulo 4. Velo

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La fiesta se llevó a cabo sin menores contratiempos, los omegas del harem pasaron a retirarse como lo dictaba la costumbre, solo quedarían los alfas y los altos mandos para hablar sobre el destino del clan y las nuevas alianzas

Atsushi se encontraba aliviado al ya no tener que soportar ese ambiente molesto que simplemente lo estaba estresando, se despidió de su padre, muy a su pesar, y se retiró con las demás mujeres del harem

Todos los omegas fueron dispuestas en la misma habitación para descansar en lo que preparaban sus habitaciones, Atsushi se sentía cohibido al estar en la presencia de todas ellas, notaba la hostilidad en el aire, sabía perfectamente que a ninguna le hacía gracia que alguien como él estuviera en la misma habitación que ellas

- ¿Así que eres del clan Nakajima? Vaya sorpresa - Dijo una de las chicas - creí que esa familia ya estaba en el olvido pero veo que a un son bastante relevantes, dime que fue lo hiciste para llegar hasta aquí, no tienes nada que ofrecerle al clan, ni belleza ni mucho menos algún tipo de beneficio así que es extraño que alguien como tú, espero no ofenderte, este aquí

Atsushi no contesto, simplemente se quedó en silencio hasta que otra de las chicas que se encontraba hasta el fondo hablo de igual manera

- Y no solo eso, por lo que se, él sera el único con él que Ryunosuke se casará, mientras que nosotras sólo llevaremos una marca, no creen que es bastante injusto que nosotras seamos tratadas como simples plebeyas cuando el único jodido de aquí es él - las demás mujeres asintieron

Atsushi se levantó molesto, no quiso crear una pelea innecesaria pero al parecer las omegas no pensaban lo mismo, lo atraparon cuando quiso salir de la habitación, lo arrastraron hasta una de las camas y comenzaron a rasguñar gran parte de su rostro hasta que una de las omegas las detuvo

- No basta con deformarle el rostro, además si Ryunosuke se entera nos irá muy mal a todas, solo suéltenlo pero háganle saber cual es su lugar, utilicen esto - la omega arrojó un par de tijeras que una de las chicas atrapó - Y que mejor que quitándole lo único hermoso que tiene

Y así, a pesar de los gritos y las súplicas, ninguna de ellas se tentó el corazón. El cabello largo de Atsushi fue cortado cruelmente y con violencia y a pesar de que intentó defenderse no pudo contra ninguna de ellas, solo se quedó observando como se reían de él mientras cortaban parte por parte sus mechones, hasta que finalmente lo dejaron en paz. Una de las omegas le pasó un espejo para que se mirara en el, sus ojos se llenaron de lágrimas cuando observó lo que le habían hecho, él hermoso cabello que había cuidado con tanto amor como promesa hacía su difunto padre quien le pidió que jamás lo cortara ahora mismo se encontraba esparcido entre las sábanas. Se quedó en posición fetal durante toda la noche llorando hasta que el amanecer llegó

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Todas las omegas se encontraban en la mesa degustando del desayuno como si lo qué pasó la anterior noche jamás hubiera ocurrido. Ryunosuke apareció por la puerta con sus dos escoltas, todas se levantaron de inmediato para hacer una reverencia que fue reciba por el alfa quien con un ademán pidió que siguieran con el desayuno

Él azabache se sentó en la silla principal de la mesa, pidió un café hasta que noto la ausencia de uno de sus omegas, específicamente la de Atsushi, llamó a uno de los sirvientes de manera inmediata

- ¿Donde está Atsushi? ¿Por qué no está en la mesa?

- Él joven Nakajima se encuentra indispuesto, ha pedido que nadie lo moleste

- Esto es inaceptable, tráelo de inmediato, él debe estar aquí, a mi lado, así que no pierdas el tiempo y haz que venga o te juro que te castigaré - el sirviente asintió, Ryunosuke se quedó esperando sin tocar en ningún momento su desayuno hasta que su omega estuviera ahí con él

Pasaron algunos minutos y finalmente la silueta del sirviente apareció pero al ver que no estaba Atsushi, gruño molesto

- Acaso no entendiste lo que te ordene - Ryunosuke sujeto fuertemente el cuello del sirviente

- Lo l...lamento pero el joven Atsushi

Pero antes de que el sirviente pudiera decir una palabra más, por el marco de la puerta apareció Atsushi, Ryunosuke quedó completamente deslumbrado por la nueva apariencia y vestimenta del omega, su cabello estaba cubierto por un velo azulado sujetado por un par de broches en forma de orquídeas y qué decir del kimono que hacía juego con el color del velo, era simplemente perfecto

Las omegas también quedaron sorprendidas, creyeron haber desestabilizado al omega, lo cual era cierto pero ellas no lo sabían, Atsushi simplemente era bueno escondiéndolo todo hasta sus propias emociones

- Ven - Ryunosuke extendió la palma de su mano para que Atsushi la tomara, él omega camino y ante la mirada de las demás la tomó, sabía perfectamente que esta acción las molestaría - ¿Que sucedió con tu cabello? - Dijo con preocupación, Atsushi miro hacia otro lado cohibido

- Nada, simplemente quise cortarlo - Atsushi apretó fuertemente sus puños, Ryunosuke quiso indagar más pero fue llamado de improvisto

- Tengo que irme, pero quiero que sepas que lo que necesites te lo daré, se que me he comportado como un completo imbecil pero realmente me importas y no quiero que haya más distancia entre nosotros - Ryunosuke tomo nuevamente la palma de Atsushi, dejo un casto sobre está esperando algún tipo de confirmación por parte del omega pero el albino quito su mano de manera delicada haciéndole saber que a un no lo aceptaba del todo - No importa el tiempo, haré que me ames como yo te amo - Susurro antes de irse por la puerta

Atsushi quedó pensativo ante las palabras de Ryunosuke, analizándolas detenidamente mientras veía cómo las omegas se burlaban de él en cuanto el alfa se retiro, la ira comenzó a inundar sus pensamientos, su rostro se había vuelto rojo al ver las sonrisas descaradas de las mujeres, ya estaba harto de esta situación, había soportado muchas humillaciones a lo largo de su vida pero esto ya era inaceptable, su corazón estaba completamente roto y sobre todo corrompido, él amor por Yukito era lo único que a un le daba esperanza pero sabía que qué tarde o temprano también se lo arrebatarían como lo hicieron con el único recuerdo que tenía de su padre

Las omegas se levantaron de la mesa y antes de que pudieran retirarse Atsushi pidió a uno de los sirvientes que no las dejaran salir, una de ellas iba a reclamarle por esta desfachatez pero al voltear y ver que el albino estaba sentado en el lugar de Ryunosuke sintió miedo y terror al ver su semblante siniestro

- Olvidare lo que me hicieron, pero quiero que sepan que de ahora en adelante ninguna de ustedes volverá a tocarme

- JA, acaso crees que puedes amenazarnos, un simple y patético omega como tú que.. - Uno de los sirvientes la quitó rápidamente antes de que una de las copas de cristal impáctara contra ella, su semblante se volvió pálido al ver la fuerza con la que Atsushi se lo había lanzado

- ¿Terminaste? Ahora escuchen - Grito, levantandose de la silla - Sepan que Ryunosuke al que quiere es a mi y si yo le pido que las ejecute a todas hasta creen que me dirá que no, así que si son lo suficientemente inteligentes no se meterán conmigo o de lo contrario haré de sus vidas un verdadero infierno



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Hola que tal, como estan muchas gracias por leer este capitulo, espero les haya gustado.
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sin nada más que agregar me despido, nos vemos en la proxima actualización
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𝕻𝖊𝖗𝖉𝖔𝖓𝖆𝖒𝖊             (𝐒𝐡𝐢𝐧𝐬𝐨𝐮𝐤𝐨𝐤𝐮)Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora