el príncipe y el plebeyo

cap. 3 soy como tu

Narrador omnisciente

Han pasado dos años desde que las minas se derrumbaron por accidente, dos años donde ella perdió a su amado esposo, dos años desde que sus súbditos sufren hambres, y solo una semana desde que le dijeron que el oro de la mina real se había terminado, hace una semana su reino entro en bancarrota, su consejero Orochimaru estaba de viaje y tardaría en llegar, ella estaba desesperada, no tenía una solución en todo esto, entonces pensó en la propuesta del rey y la reina del hielo, así que ya había encontrado una solución a sus problemas además de que el instructor de su hijo era pariente de la familia real así que le diría que contactará a su familia.

En otra, en la aldea precisamente.

Kiba— no entiendo porque tanto drama, el hecho de que Naruto no nos haya hablado.

Neji— pero en cierto modo es preocupante hace exactamente dos años que no nos habla.

Kiba— ya sabes cómo es, no es para preocuparse verdad Akamaru.

Akamaru— guaf.

Kiba— vez Akamaru piensa lo mismo que yo.

Neji— espero que tengas razón.

En otra parte de la aldea.

Se veía a un joven de doce años de cabellos dorados y alborotados y hermosos ojos azules, pero una mujer de mediana edad le reprochaba al joven que vendía sus flores por unas cuantas monedas de oro.

Mujer— solo quítate de aquí mocoso, es más importante vender mis tartas que tus insignificantes flores.

Ok esa señora estaba por superar sus límites de paciencia, pero para su desgracia llegó la encargada del orfanato, y eso significaba problemas.

???— otra vez holgazaneando? Debería darte vergüenza pero ni para eso sirves, ve a hacer algo en el que no metas la pata o habrá problemas.

Joven— si madame Subliman.

Madame Subliman era la encargada del orfanato pero ella era muy famosa por su taller de costura, en donde ponía a trabajar a los donceles y mujeres.

Una chica de cabellos rosado se acercó al joven rubio.

Sakura— Naruto, no me digas otra vez la misma señora.

Naruto— y no es mi culpa, esa señora me odia, me sigue a todas partes y siempre me causa problemas.

Sakura— sabes que desde lo de la mina la vida se ha vuelto difícil.

Naruto— pero estamos cerca Sakura-chan solo un poco más y podremos irnos de aquí.

Sakura— en eso tienes razón, muy pronto seremos libres.

Naruto— si

Ambos muchachos se fueron por su camino mientras que en el palacio.

Menma— no lo aceptó.

Tsunade— tienes que entender que esto no es por ti, es por tu reino, o prefieres que tu reino caiga en desgracia solo por capricho tuyo.

En eso tenía razón, no podría ser egoísta estaría condenando a mucha gente.

Con resignación aceptó, poco después fue a tomar las clases y hablaría con su profesor, confidente y amigo, quería que eso llegará a más de una amistad pero ahora no podría cumplir ese sueño.

Llegó a su estudio y ahí lo encontró junto a su dama de compañía, fiel amiga y consejera.

Hinata— Menma, que te querían comunicar?