Ice cream: el heladero malvado

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-Daniel ayúdame con las bolsas del supermercado-.Mencionó mamá entrando a casa.

-Lo siento no puedo-.Respondí corriendo hacia la calle. Escuché que mi padre bufó por no haber ayudado a mi madre pero el no sabía la gravedad de este asunto.

Corrí hasta la esquina de la calle y solo divisé a lo lejos el camión de helados. Frustrado comenze a gritar de desesperación por no haber ayudado a mi amigo. Me devolví a casa para buscar mi bicicleta e ir cuanto antes detrás de la camioneta para liberar a Charlie. Para mi sorpresa, al heladero se le callo un mapa en las afueras de mi casa. En el, se especificaban todas sus estaciones de trabajo. Antes de tomar mi bicicleta Mamá me dijo:

-¡DANIEL J. BROWN A TU HABITACION!.

-Pero Má debo salir...

-¡Daniel obedece a tu Madre!-.Espetó papá-.estas castigado hasta mañana.

-¡No puedo, debo ir a la tienda de cómics con los chicos!

-A tu habitación o te quedas sin hallowen-.Finalizó mi mamá con tono molesto.

Rendido subí a mi habitacion cerrando la puerta con llave y me lanzé a mi cama tratando de pensar en como escaparme. En eso, recordé que en uno de mis cajones tenía una cuerda firme que podía amarrar a un clavo que estaba en mi ventana y bajar sin problemas hasta el antejardin. Ante de colocarla, ordené mi mochila para llevar el mapa, un tirachinas en caso de necesitarlo para defenderme y las llaves de la casa aunque entraría por la ventana para que nadie me notara.  Acomodé las almohadas en mi cama para que creyeran que estaba durmiendo y puse la radio a volumen bajo. Luego de eso, tire la mochila hacia afuera y coloque la cuerda para desplazarme hasta el antejardin.

Tome mi bicicleta y comenzé a pedalear lo más rápido posible. Tan así que un auto casi me estrella pero alcanse a esquivarlo y logre alcanzar de lejos la camioneta de helados. Note que hiba por un camino oscuro dirigiéndose a una caseta que estaba cerca de la cafetería según el mapa. Lo seguí despacio para que no me esuchara.

Luego de unos 10 minutos, entró por el portón principal y se estacionó. Acto seguido, dejé mi bicicleta con cuidado afuera de la caseta y miré disimuladamente para ver que estaba haciendo. El heladero estaba dentro de una habitación intentando arreglar un refrigerador que a simple vista se veía averiado. Me asuste tanto que pensé de inmediato que metería a Charlie en el refrigerador pero antes que eso ocurriera me armaría de valor para sacarlo de la camioneta. Al abrirla noté que Charlie estaba aún inconsciente y la jaula estaba ultra cerrada. Revisé despacio cada cajón de helados y muebles de la camioneta para ver si se encontraban las llaves pero no hubo caso. En eso senti que el heladero insultaba al refrigerador al ver que no tenía arreglo y cerró la habitación para dirigirse a la camioneta. Rapidamente baje, cerré las puertas y salí de la caseta escondiéndome junto a mi bicicleta tras unos árboles mientras esperaba a que el heladero saliera para seguirlo.

La furgoneta comenzó a dirigirse al parque infantil. Esto era más extraño de lo que creí pues ¿Que haría el heladero allí si a esa hora de la noche no habían niños para vender helados?...noté tras las rejas del parque que tomó una bolsa de basura y con harta fuerza echo algo ahí. Preocupado, entre nuevamente a la furgoneta pensando que podría estar asfixiando a Charlie pero para mi tranquilidad estaba todavía allí en la jaula. Cerré nuevamente la furgoneta comenze a seguir algunas huellas marcadas en la tierra para ver a donde se dirigía el heladero pero lamentablemente la zona del parque estaba clausurada.

Sin embargo, noté que estaba una grúa con llaves que podría servirme ¡Claro! Podría destruir parte de de la reja o cabar tierra para entrar por debajo al otro lado y saber que hacia el heladero allí.

Antes de subirme a la grúa, mire disimuladamente para ver que estaba haciendo el heladero con esa bolsa de basura. Se veía un gran bulto en su interior y con una pala comenzó a enterrar la bolsa en el otro lado del parque. Estaba claro que dentro de esa bolsa había un cuerpo pero no era momento para acobardarme. Tanto Charlie como ese cuerpo necesitaban de mi valentía para poder desenmascarar a ese sicopata y me propuse a lograrlo. Justo antes de que el heladero terminará de enterrar la "bolsa de basura", Sonó un walkie-talkie que tenía en su bolsillo. Era de la cafetería solicitando un pedido de helados. Rapidamente se quito los guantes, los escondió en esa bodega azul junto a la pala y comenzó a dirigirse a la furgoneta. Aproveche el momento para entrar a esa zona del parque donde dejo el cuerpo.