Prólogo

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Prólogo

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Prólogo

Leo


Observo a Liam retorcerse las manos con nerviosismos. El pobre ha pasado el día planificando una sorpresa para Johana y tiene miedo de que no lo perdone. Poco probable que eso ocurra, Johana está enamorada de él. Puede que esté dolida, pero esa chica le perdonaría eso y más a Liam.

Viendo a personas como ellos, confirmo que el amor verdadero existe, aunque tengo la firme creencia de que no es para mí. Las relaciones formales no son lo mío, las veces que lo he intentado han salido mal, lo que ha causado que las deje de lado. La última vez que tuve una novia fue una actriz; era una buena chica y teníamos química, pero nuestros horarios nos distanciaron hasta el punto en que ya no quedaba nada entre nosotros salvo bonitos recuerdos y desapego emocional. Desde entonces solo tengo rollos de una noche o relaciones sin complicaciones con mujeres que saben que no busco algo serio. Algunas de ellas han tenido problemas al creer que cambiaré de opinión, pero cuando aclaro las cosas, se alejan odiándome y hablando pestes de mí.

Es una suerte que no se lo digan a la prensa o mi reputación estaría por el suelo.

—¿Creen que le guste la canción que compuse? —pregunta Liam por sexta vez en lo que va de viaje hacia el lugar en el será la celebración del estreno del disco de Johana, Escúchame.

Luego de que la chica se negara a hablar con él sobre lo sucedido con Antonella el día que nos hicieron la entrevista, se embarcó en la planificación de una presentación en vivo en el estreno de hoy para pedir perdón. Como músico, sé que a veces se nos facilita más decir las cosas mediante la música que en palabras habladas, así que le di todo mi apoyo para que llevara a cabo su plan. Con la ayuda de Lianna ‒Dios la bendiga‒, pudo meter un escenario en medio del lugar de la celebración, a escondidas de Karol y Johana.

Debería haber más personas en el mundo como Lianna, eso es seguro.

—¡Pero claro que le gustará! —afirma JJ, palmeando la espalda de Liam—. Tú solo asegúrate de no perder la voz a causa de los nervios.

Liam suspira y cierra los ojos, recitando palabras que no alcanzo a entender.

Cuando llegamos al lugar del evento, nos recibe la prensa en la entrada y Happy tiene que presionar la bocina unas cuantas veces para que estos se aparten.

Me pregunto, ¿no tienen nada interesante qué hacer con sus vidas nada más que perseguir celebridades?

Son unos pesados.

—Gracias por el consejo, JJ, no sé qué haría sin ti —murmura Liam, irónico.

—Soy el mejor amigo que puedas tener —dice JJ, alzando la barbilla con orgullo e ignorando la ironía en las palabras de Liam.

—Después de mí —interviene Dan desde el asiento del copiloto, alzando la mano.

Él y JJ bien podrían hacer una carrera de comediantes, les iría bien. No pueden pasar más de dos minutos sin hacer una broma de cualquier situación. Creo que eso es precisamente lo que saca de quicio a Hannah, que no pueden mantener la seriedad ni cuando así se requiere.

Tócame © | The Scene II.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora