𝗔𝗴𝗲𝗻𝘁𝗲 𝗗𝗲 𝗦.𝗛.𝗜.𝗘.𝗟.𝗗.

16. 𝗗𝗲𝘀𝘁𝗿𝘂𝗰𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝗗𝗲𝗹 𝗣𝗿𝗼𝘆𝗲𝗰𝘁𝗼 𝗜𝗻𝘀𝗶𝗴𝗵𝘁

Hill nos sacó de ahí y nos llevó a la instalación secreta donde se encontraba Fury, al llegar Steve y Sam ayudaron a Nat a bajar de la camioneta mientras ella se presionaba la herida con unas vendas, cuando nos adentrábamos, el doctor Fine se acercaba a nosotros.

— Herida de bala, perdió casi medio litro — Avisó Hill.

— Talvez uno — Añadió Sam.

— Yo me encargo — Respondió el doctor Fine.

— Antes hay que verlo — Habló Hill

Seguimos a Maria nos guio hasta el sitio en en que estaba descansando Fury, deslizó la cortina para que Romanoff y Rogers vieran con confusión al director vivo en una camilla con un equipo para venoclisis.

— Al fin se dignan venir — Dijo Fury.

— Debería decirles todos los daños que sufrió, tal parece que no procesan el hecho de que siga con vida — Mencioné.

— Laceración en la columna vertebral, fractura de esternón, clavícula destrozada, hígado perforado y una horrible jaqueca.

— Olvida el daño en el pulmón — Añadió Fine mientras atendía la herida de Natasha.

— Oh no hay que olvidarlo, fuera de eso, estoy bien.

— Yo los vi operarte, tu corazón se detuvo — Dijo Nat.

— Tetrodotoxina B, reduce el pulso a un latido por minuto, Banner lo desarrollo para el estrés, no le fue de gran ayuda pero hallamos un mejor uso.

— ¿Y porque tanto secreto?¿Por que no nos dijiste — Steve se miraba algo molesto.

— Todo intento de asesinarlo debía parecer exitoso — Respondió Hill.

— Si ya estas muerto no pueden matarte, eso y no sabía en quien confiar.

— ¿Qué es lo que vamos hacer? — Pregunté.

— Ya se los mostraremos, solo denme un momento.

Hill ayudó a Fury a sentarse y Fine le colocó una férula en el brazo izquierdo una vez que se desocupó con Natasha. Maria, Fury, Nat y yo estábamos sentados en un gran escritorio con una que otra laptop que Hill estaba usando mientras que Steve y Sam miraban de pie.

— Este hombre rechazó el premio Nobel de la paz — Empezó Fury mirando una fotografía de Pierce — Dijo que la paz no era un logro, era una responsabilidad — Dejó caer la foto sobre la mesa — Saben, cosas como esta son las que me hacen desconfiado.

— Hay que impedir el lanzamiento — Dijo la agente mientras miraba a cada uno de nosotros.

— Dudo que el consejo me responda todavía — Fury abrió un maletín donde había tres tarjetas de programación.

— ¿Qué es eso? — Preguntó Wilson.

— Cuando los Helicarriers alcancen los novecientos metros — Hill comenzó a explicar volteando una de las laptops para mostrarnos lo que pasaría — triangularán con los satélites de Insight y quedarán cien porciento armados.

— Hay que infiltrar los Helicarriers y reemplazar sus tarjetas de programación con las nuestras — Continuó Fury.

— Uno o dos no bastan tenemos que enlazar los tres Helicarriers para que funcione, por que si una sola de esas naves continúe en funcionamiento, cientos de personas morirán.

— Daremos por echo que todos abordo de los Helicarriers son de HYDRA, hay que incapacitarlos, insertar las tarjetas y talvez, solo talvez salvemos lo que queda de-