intro.

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La madre de SungHoon miraba con terror el pedazo de papel que su hijo sostenía en sus delicadas manos. Aquel determinaría su futuro; si sería un alfa territorial o un idiota omega que forzadamente sería mandado al campo de concentración para su inevitable ejecución.

Porque cuando el ejército de los Lee —el clan de alfas de raza pura— llegó al poder, todo hombre omega debía ser eliminado de la faz de la tierra. Porque no podía existir alguien que corrompiera la perfección que sus antepasados habrían otorgado al universo. 

Y aquello no sería preocupación para el menor de los Park si no supiera que su cuerpo ha estado experimentando cambios no precisamente propios de un alfa, o que el gen de los omega ha sido el dominante en las ultimas generaciones de los Park. SungHoon, siendo el primer hombre nacido tras tener únicamente familiares mujeres.

ㅡTu padre fue un respetable alfa, debemos confiar en él. ㅡla de hebras doradas intenta no poner de los nervios a SungHoon.

ㅡMamá, ¿y si soy un omega? ㅡpregunta con sus ojos brillantes, las lágrimas amenazaban por salir.

ㅡTe amaré de igual manera. ㅡresponde con un dolor en su corazón. No quiere ser ella quien sentencie el futuro del castaño.

ㅡMamá, ellos vendrán por mi. ㅡsu voz se rompe, no puede evitarlo. 

Su madre toma el papel de sus manos, sin siquiera ver el resultado, lo rompe en mil pedazos. Corre hacia su pequeño y lo abraza fuerte, ambos están sollozando tan fuerte que se siente el dolor que sus pechos reclaman. No desean separarse, es mejor permanecer así, donde nadie puede quitarles lo que más aman.

Minutos más tardes, fuertes golpes se escuchan en la puerta. Tan estruendosos que los obligan a guardar silencio.

SungHoon no es ningún criminal, tampoco ha cometido actos vandálicos, pero su casa ha sido rodeada por decenas de hombres con el objetivo de llevárselo y no permitirle escapar.

Es separado de los brazos de su madre, quien no deja de gritar el nombre su hijo. Intentando golpear a los hombres que le doblan la estatura y la fuerza. SungHoon solamente se resigna, porque ese ha sido su destino.

ㅡYo simplemente, no pertenezco ㅡmurmura cuando sube a la furgoneta y sus manos son esposadas.

ʿʿ ámame, después mátame ʾʾ  heehoon︕Where stories live. Discover now