Oneshots Stucky | Flufftober

Beso en la frente

El final estaba cerca, podían sentirlo. El mundo era un completo desastre, y aunque no estaba en su naturaleza darse por vencidos sin pelear hasta el final, sabían que las posibilidades de victoria eran mínimas. Reuniendo todo el valor que pudieran y enfocando su mente en ganar la batalla, los defensores del planeta, o al menos parte de ellos, se alistaban en el oculto país de Wakanda para recibir a aquel que llamaban Thanos. 

No había tiempo que perder, los soldados wakandianos iban de un lado al otro recolectando armas, planeando la mejor formación y rogando que pudieran vivir un día más. Al frente de la multitud, el rey de Wakanda adiestraba a los extranjeros sobre el terreno del lugar, al lado estaba Bucky Barnes, complementando las instrucciones de T'Challa con información que pudiera servir para tener la ventaja. Los meses que había pasado ahí desde que despertó de su sueño criogénico le habían ayudado a conocer el lugar como la palma de su mano. 

Después de dar las últimas instrucciones todo estaba listo, sólo debían esperar al enemigo. Unos metros delante de todos los soldados, con la mirada al frente y su tenacidad al máximo, el Capitán América esperaba el momento de empezar la que tal vez sería su última pelea. Bucky caminó hasta estar a su lado, como siempre, como en cada pelea que habían librado juntos. 

— Esto no será fácil, Buck 

— La guerra nunca lo ha sido — una ráfaga de viento sacudió su cabello. Dio un largo suspiro antes de seguir hablando — Quizá nos cueste la vida 

— Si es el precio que hay que pagar para salvar nuestro mundo, estoy dispuesto a pagarlo — Rogers vio a su compañero a los ojos. Lo único que se podía ver en esa mirada azul era determinación — ¿Pelearás conmigo hasta el final?

— Sabes que si. No planeaba morir hoy, pero si es a tu lado, no me importaría 

— En ese caso, tratemos de sobrevivir

— Trato hecho 

Sus rostros se adornaron con una sonrisa. Parecía una broma cruel del destino. Después de todo por lo que habían pasado, por fin estaban juntos, libres de todo lo que los separaba. Y justo cuando creían que podrían comenzar una nueva vida juntos, tenían que arriesgar sus vidas una vez más. 

— Buck, si salimos vivos de esto...

— Cuando salgamos vivos 

— Si, claro. Cuando salgamos vivos de esto, quiero que volvamos juntos a Nueva York. Sin Hydra, sin vengadores, sin nadie. Sólo tu y yo 

— Es la propuesta más tentadora que me han hecho en el día. Después de salvar el mundo, claro. 

No había tiempo para grandes muestras de afecto, sin contar con que tenían una enorme multitud de gente detrás de ellos. Steve pensó en no hacer nada más y regresar a la formación, dejando la promesa que había hecho en el aire. Pero al recordar la batalla que tenían por delante, prefirió cerrar el trato de otra manera. Sin importar quien estuviera mirando, se acercó al castaño y lo tomó de los hombros. Lo miró a los ojos por unos segundos antes de decirle la frase que nunca se cansaría de repetirle. 

— Te amo Bucky 

— También te amo Steve 

Después, le dio un beso en la frente. Aunque fue corto, logró transmitir todos sus sentimientos. Ocuparon sus lugares frente al ejército, esperando el inicio de la batalla. Si alguno de los dos hubiera sabido que ese beso iba a ser el último, quizá lo hubieran alargado. 

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La batalla estaba perdida. Thanos tenía en su poder todas las gemas y no parecía haber poder humano que lo detuviera. Thor estuvo a punto de vencerlo, pero su arma no logró matarlo. El enemigo dijo unas palabras, no escuchó cuales, luego chasqueó los dedos y un destello apareció de la nada. De un momento a otro, el titán ya no estaba. No entendía que estaba pasando. ¿Ganaron? ¿Perdieron? No estaba seguro. 

Vio a su alrededor buscando una respuesta, pero todos lucían tan confundidos como él. 

— ¿Steve? — el tono de voz de Barnes lo alertó

Volteó a verlo y la cruel realidad lo golpeó. Delante de él, vio como Bucky, su Bucky, se desvanecía hasta convertirse en polvo. Se acercó al lugar donde hace segundos estaba su compañero y tocó el fino polvo que se formó. Habían perdido. 

Decenas de personas se desvanecieron por todo el lugar. La gente estaba asustada, no entendían lo que estaba pasando. Algunos trataban de mantener la calma, otros sencillamente se echaron a llorar. 

Steve seguía de rodillas en el suelo, tratando de asimilar lo que acababa de pasar. Había perdido la batalla, había fallado en proteger al mundo...había perdido a la persona que más amaba en el universo. 

Tenía que levantarse, reagruparse y pensar en lo que debían hacer ahora. Sin embargo, su mente parecía estar congelada. Parecía que no procesaba nada de lo que estaba pasando. Se movió en automático. Reagrupó a todos, dividió las tareas y comenzó a trabajar en lo que había que hacer ahora. Por fuera, aparentaba tener todo bajo control, manejando la situación con calma y analizando todo, como siempre. 

Pero por dentro, su mente seguía en aquel momento, en esos instantes antes de la batalla que ahora le parecían lejanos aunque apenas hubieran pasado unas cuantas horas. No iba a poder cumplir su promesa, no podría vivir en Nueva York con Bucky y no podrían empezar una vida juntos. Por lo menos le consolaba saber que le dijo que lo amaba una última vez, y siempre tendría el recuerdo de ese último beso, donde le transmitió todo lo que sentía y lo que siempre sentiría, sin importar que ya no estuviera con él.