Capitulo 3

981 65 10
                                    

Ya había pasado un año desde que comenzó con su labor de vigilante, cumpliendo así 15 años siendo cerca la fecha para hacer el examen de la prestigiosa academia, eso sí algunas cosas habían cambiado.

Al comienzo paraba pocos robos al no saber los puntos claves de la ciudad, aparte de tener un poco de preocupación de ser descubierto, pero con el tiempo se fue soltando cada vez más, y cada una de las sonrisas que le daban hacían que desvelarse valiera la pena.

Pero después empezó a parar acosadores, pequeñas peleas, algunas bandas callejeras que eran fáciles etc, aparte que uno que otro villano que su hermano permitía al dar descripciones, pero los dejaba amarrados en frente de una comisaría para no llevarse el crédito y presumirlo como un fanfarrón

El ayudaba a la gente del sector que poco a poco empezaba a agarrar confianza con el, y cuando los ayudaba el no decía su nombre al no escoger uno ya que según el "no era un héroe y por lo tanto no era merecedor de tener un apodo, por no haber entrenado ni trabajado algunos años para poder tener el título como tal, y nombrarse a si mismo héroe, sería colgarse de un título no ganado", pero la gente lo empezó a llamar el ángel nocturno, ya que solo trabajaba de noche.

Los héroes lo habían intentado atrapar un par de veces por el uso ilegal de quirk, pero este siempre desaparecía en un callejón, dejando aturdidos a los héroes y dejándolo en paz, aún que cuando un héroe lo ve, lo persigue para detenerlo, obviamente sin conseguirlo.

También ese año conoció a una chica la cuál consideraba su mejor amiga, la cuál ayudo de ser asaltada, y la acompañaba un rato todos los viernes, se llama Kyoka Jirou, y recordaba perfectamente como la conoció

-Flash Back 6 meses atrás-

Podemos ver a una chica baja, de unos 14 años, no tenía un cuerpo llamativo pero era igualmente bella, tenía una polera manga corta con las palabras "Music K.J" bordadas en morado oscuro, al igual que unos pantalones sueltos del mismo color que las letras y tenis negros, pero lo más llamativo era un bolso que llevaba en la espalda en el cuál llevaba una guitarra.

Era de noche, se había escapado de casa para tocar en un pequeño bar/cafetería, le habían permitido tocar ahí, pero solo en horarios nocturnos, ella acepto y esa noche fue su primera tocada que salió bastante bien, pero tenía que volver a su casa antes que sus padres se den cuenta de su ausencia.

Ella no era del todo conciente de lo peligroso que podía ser, que una chica adolecente caminara en medio de la noche sola con solo una guitarra que valía una buena cantidad, más ensima por un aún que sea corto callejón para acortar el camino, estaba tan metida escuchando música que no escucho los pasos de unos sujetos aproximarse hacia ella con hostilidad, por más irónico que parezca.

Paró al sentir con la empujaban contra una muralla del callejón, ella por la impresión no supo cómo reaccionar al ver qué estaba acorralada con dos hombres de buena estatura y con un cuerpo medianamente trabajado, y junto a ellos una chica casi de su misma estatura pero con más pechos y el pelo café.

Mira chica no estoy para juegos, así que solo dame todo lo que tengas y no saldrás muy herida -explico la mujer, mientras uno de los hombres convertía sus puños en acero se acercó un poco dejando más atrás al otro sujeto y este sacaba fuego amarillo de sus dedos-

Pero sin poder gritar por ayuda, la mujer de grandes atributos le tapo la boca impidiendo hacer un sonido aparte que sin querer boto un tarro de basura el cuál hizo un gran sonido, pero el resto del grupo no se preocupo porque creían que no habían héroes por está zona, y tenían razón, bueno, en parte.

La chica solo tenía tiempo para saber que podía hacer para defenderse y no salir herida, pero vio como una persona desde las sombras salió sin hacer ruido, golpeando al tipo en el cuello de la parte trasera haciendo que se desplome pero antes de tocar el suelo, dos plumas blancas como la nieve lo afirmaron y lo subieron muy alto colocándolo en la cornisa del edificio trasero; esto le dio esperanza a la chica, pero el otro hombre con nudillos de acero se dio la vuelta al escuchar un paso, pero el salvador había desaparecido para luego aparecer casi al frente a el el hombre grito un poco para llamar la atención de la mujer

"Ghost/Angel" Izuku VigilanteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora