Capitulo 04

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Tamara.

— Eso no es necesario Alpha.— dijo un anciano a lo que todos los presentes agacharon sus cabezas.

Ahora ya no era un koala, ni un molusco, era las dos cosas.

Respire profundo, era el anciano del consejo de lobos. Nunca fuimos ante el para aprobar dicha unión, ahora todo estaba perdido, necesitaba arreglar las cosas para que nadie saliera perjudicado.

—Quiero respuesta ya.— exigió el Alpha.

—Claro está en todo tu derecho.—se sentó.— Ella es claramente tu mate, pero antes de amenazar deberías ser cuerdo muchacho, por fin has conseguido a tu Luna, no aportaría nada bueno.— aclaro todo y eso me hizo sentir muy mal.

—¿Cómo es posible que hayan permitido tal unión?— pregunto incrédulo ante la idea.

— Ellos nunca vinieron ante nuestro consejo, joven Alpha. Le aseguro que cada uno tendrá un castigo por tal abominación.— tomo un sorbo de agua.

— Eso creí— gruño.

Angustiada por las palabras del anciano, sentí de caer.

— No pueden hacer tal cosa, solo no pudimos decidir ante el amor.— digo llorando angustiada.

— Eso lo decidiremos con los otros tres ancianos, y no habrá nada, ni nadie que pueda romper con nuestro mandato.— exaltado por la reacción de mi parte, no tuvo compasión.

Mis dos familia estaban derrumbándose, me fui con Ashton a los baños.

— Tami, ahora mismo tienes que entender que lo que dicten los ancianos así será, pero prométeme que pase lo que pase, te darás la oportunidad de amar de nuevo.— lo mire incrédula ante lo mencionado.

— Te prohíbo de nuevo hablar así, ¿Me oyes? Sabes muy bien que eres mi puta vida, que sin ti, yo no existo. Te amo tanto que no imagino mi vida sin ti.— le reproche, en un sollozó.

—Perdona Tami, estoy asustado, no quiero perderte, nunca debí hacerlo, eres mi vida entera.— golpeó con fuerza la baldosa del baño.

Intensamente lo bese, no paraba de hacerlo, el por un momento lo pensó pero accedió. Le fui quitando el saco, y el desabotonando mi vestido, estába envuelta en medio de la desesperación, tenía el vestido ya fuera de mí, gemi ante su apretón en mis nalgas, me alzó colocando mis piernas alrededor de su cintura, ¡Jesús! Como amaba a este hombre, le fui quitando su camisa a lo que le chupaba todo su pecho, mordí su cuello a lo que el me regaló un gemido que me prendió, de repente escuchamos un estruendo. Pero lo ignoramos y seguíamos en nuestra ansiedad por saciarnos.
Hasta que mi hermano y Amy nos interrumpieron.

— El Alpha está que destruye todo el lugar, déjense de una ves de juegos, mira que desde aquí se escuchan tus gemidos Tamara. — dijo molestó mi hermano.
Mire a Ashton sorprendida y molesta.

No me quise vestir, a lo el que tuvo que hacerlo enojado. No entendí su actitud, se que era algo complicado pero antes muerta que irme con ese malnacido. Me llevo a empujones, y antes de causarle un enojo más a Ashton, le seguí.

—Te parece gracioso irte acostar con este.— dijo sin expresión alguna.
Lo mire en desaprobación.

—Tu no eres nadie, para venir a imponer sobre mi, el es mi pareja y si tengo ganas de hacerlo lo hago.— escupi con rabia.
Este hombre sacaba lo peor de mi. Iba a venir por mí, pero su beta y el anciano lo agarraron.

Reí por mi victoria.

Ashton seguía molestó, me puse a lado de este, sabía que yo no era así, pero tan solo no queria que ese imbecil me hablara. Faltaba poco para que llegarán los demás ancianos y mis nervios se fueron al cielo.
Ante eso mi padre y madre, hablaron conmigo.

— Tamara Ward, quiero que sepas que la desición que tomen los ancianos con respecto a tu vida amorosa, no debes de tener ningun rencor hacia nadie. Porque ni el Alpha es responsable de que seas mate de el.— dijo mi padre, yo rompí a llorar.— Hija se que dolerá cualquier desición, porque aún asi, decidan que te quedes con Ashton no podrán estar aquí y si lo llegan hacer la muerte ser el castigo.— terminó de decir mi padre.

—Hija, sabes que tu padre y yo te amamos, pero esto se escapa hasta de tus manos, sabes que si en tal caso sea estar con el Alpha Damián, tu debes de ser feliz mi niña, te amo y me siento muy mal por esto, pero sabíamos que en algun momento pasaría.— Jesse era la mujer más bella del mundo y esa era mi madre.

Me dolía todo aquello, los padres de Ashton se lo llevaron lejos de mi, sé que tenía que aceptar lo que viniera. Me fui en busca de Ashton pero mis padres y ahora mi hermano no me lo permitían, estaba desesperada todavía no habían dado un veredicto y ya me sentía propiedad del Alpha.

—Padre por favor, déjame verlo, sabes que lo amo.— le suplique pero no me dejó.

— Tienes que entender que el también sufre, y necesita estar solo con su familia.— escuche decir de mi madre.




Estoy asustada, quiero a Ashton.
MT 🤍

EL ALPHADonde viven las historias. Descúbrelo ahora