Tres.

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El ambiente es tenso y las feromonas impregnadas de angustia de Takemichi sofocan la habitación, incluso Chifuyu siendo un Beta puede sentir como su cuerpo es afectado por éstas.

-Es complicado de contar para mi ahora. Incluso tras siete años no creo que pueda hablar de ello con facilidad.-Exclama Takemichi aún aferrándose al torso ajeno.

Chifuyu frunce el ceño al ya no poder aguantar la sobrecarga de aromas, y en un movimiento brusco separa al Omega de su cuerpo, quién le mira con los ojos aguados mientras se muerde el labio inferior, apunto de romper en llanto.

-Lo siento, Takemichi. Tu olor me está abrumando.-Dice Chifuyu mientras se levanta del sofá para abrir la ventana, dejando salir un largo resoplido de su boca.

Takemichi se sonroja por la vergüenza al ser consciente de que es verdad, su olor se estaba expandiendo como si fuese ambientador. De inmediato sigue a Chifuyu, levantándose del sofá para tratar de disimular e ir a por un vaso de agua a la cocina, en lo que sus feromonas terminan de disiparse.

Entre nervios, el Omega bebe agua tratando de recuperarse de la avalancha de emociones que lo atacaron. Pero en eso, Chifuyu se acerca a él y hace la pregunta crucial.

-¿Esto tiene algo que ver con la pequeña Kokomi? ¿Es por que ella es hija de Mikey?-

Takemichi por poco se atraganta con el líquido, con prisa deja el vaso de lado para comenzar a toser desesperado. Chifuyu le acompaña dándole palmadas en la espalda.

-¿Cómo sacas esas... esas conclusiones?-Interroga Takemichi aún dando bocanadas para tratar de recuperar el aliento.

-Es... es la única persona con la que conozco que tuviste una relación romántica en tu vida. Sé que luego pudiste haber conocido a alguien más, pero, desde el momento en que esos ojos me miraron, no pude pensar en otro que Mikey. Es la misma mirada, las mismas profundas pupilas oscuras.

Takemichi recobra la postura y por inercia toma distancia, cruzando miradas con el otro azabache.

-No entiendo que relevancia tiene quién sea el otro padre de Kokomi. Solo me necesita a mi, yo soy su único papá y punto.

-¿Y si él supiera que tienes a su hija y por eso te está buscando?-Insiste Chifuyu, muy ensimismado en la idea.-Es decir, ¿Porqué él querría verte a ti después de tantos años? Aplastándonos a todos sólo para verte a ti.

-Chifuyu -Lo llama con palpable molestia.-estás diciendo cosas muy extrañas. De verdad, desde que llegaste no comprendo nada. Solo consigues asustarme más y más. ¿Porqué?

El Beta se queda callado y desvía la mirada en otra dirección, entornando los ojos y apretando los labios.

-Takemichi, yo... necesito salvar mi pellejo.

Es entonces que Takemichi retrocede bruscamente, dándose cuenta que Chifuyu lo ha acorralado en el pequeño espacio de la cocina. En un impulso como acto de defensa, toma el vaso de vidrio que se halla sobre la encimera y se lo arroja al Beta que se encuenta aún evitando mirarlo. El recipiente se rompe y Takemichi sólo puede escuchar un grito, se cubre el rostro con ambas manos y pasa por el costado de Chifuyu corriendo, yéndose directo a la habitación de su hija, encerrándose allí.

Takemichi hiperventila y suelta feromonas de puro terror, abrazando a la pequeña que no entiende nada de lo que está pasando y solo puede sentir a su padre temblar como si fuera a desarmarse.

No puede creerlo, ¿Entonces Chifuyu todo este tiempo había estado hablando y haciendo esas preguntas sin coherencia sólo para ganar tiempo? Qué ingenuo, él solo se estaba dando cuenta de los errores que había cometido ahora que es demasiado tarde.

Todo por ti ; maitake (omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora