❝Las lágrimas que hoy derramo y la sangre que recorre mi piel, han de valer la pena. Porque sé que tu corazón se ha de desgarrar cuando tus hombres me lleven al salón de ejecución. Sonreiré cuando tus ojos me vean morir, y tu conciencia se percate q...
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Llega la mañana del día miércoles. Han pasado dos semanas completas desde la llegada de Yoongi al campo de concentración. Una semana que no ve a Jimin. Cada vez que se le presentaba la oportunidad, lograba escuchar los chismes provenientes de las cachacientas bocas de los militares. Únicamente sigue el consejo de Hoseok, mantiene la cabeza baja, hace lo que se le pide, no entra en discusiones.
Ha notado que el nuevo general es bastante diferente a Jimin. Chanyeol se la pasa la mayor parte del día vagando por el campo de concentración, al parecer no le interesa lo que pasa ahí. Echa tres dados al viento, el número que caiga será el número de personas que mandará a la cámara de gas. Para la suerte de Yoongi, su compartimiento no ha sido seleccionado en los últimos días y se alegra el poder tener un día más para rellenar su inservibles pulmones de oxígeno.
Decenas de personas mueren, en su lugar otros hombres omega toman sus anteriores lugares. El movimiento de captura se ha agilizado, los hombres prisioneros de la sección A y B se han juntado para la construcción de nuevos compartimientos. Caminan más de siete kilómetros al día, cargando con pesados materiales de construcción. Se planea traer a los niños también, Taehyung ha mejorado la detección temprana de los genes omega. No se detienen, el preciado futuro se siente cada vez más cerca. Ha escuchado que apenas traigan las literas, capturarán a los pequeños.
Yoongi se dirige al consultorio con el objetivo de que Taehyung actualice su estado de debilitación.
— ¿Veinte por ciento? —el de bata blanca se pregunta así mismo— Ayer tenías treinta y siete, debe ser un error técnico. —vuelve a la máquina, repite los pasos en busca de solucionar el error.
Min únicamente alza la mirada para ver a través de sus hebras el número que se muestra en pantalla. Era verdad que las golpizas se habían reducido, la alimentación era aún más buena; los dolores de hambre por la noche cesan. Mientras cantaba en las fiestas de relajación, robaba pedazos de pan y queso. Comía un tanto, el resto se lo llevaba a Hoseok, quien lo tomaba con una hermosa sonrisa.
— Sé que te han quitado la hora de la cena. Ahora recibo raciones adicionales. Voy a tratar de compartirlas contigo y los demás cada vez que pueda
Los últimos dos días las cosas se han salido de control, se ha rumoreado que los mismos prisioneros esparcen rumores de sus compañeros para que sean asesinados con la creencia de "entre menos hombres haya, habrá más comida para distribuir".
19%
El porcentaje en cuestión de segundos habría bajado.
Taehyung camina de un lado a otro, no hay respuesta ante la enorme duda que se forma en su cabeza.
— La fórmula no va como debería. No puede ser que tus células mejoren en igual de morir. —su puño golpea la mesa de metal, provocando una abolladura. Toma el teléfono, llama a alguien que contesta al instante— Traigan a Sung SungJoon, el de la habitación C-001.
