Cuando vio a chan casarse con quien una vez consideró su mejor amigo, Felix creyó que era tiempo de olvidarse de su amor no correspondido y avanzar por su cuenta.
Pero sus planes se arruinaron por completo cuando de pronto, se entero que estaba espe...
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Ocho primaveras pasaron desde que esos niños se habían unido como mejores amigos en un juramento que en ese momento parecía infantil, sin embargo, lo que empezó con una promesa inocente se convirtió en algo verdadero y puro.
En una amistad sinigual y sincera, indescriptible ante los ojos que observan con envidia la bonita amistad que actualmente cumple ocho años desde que empezó.
El mayor sonrió cuando se bajó se su bicicleta, la dejó al lado del auto de los Lee y se quitó el casco porque sabe que no puede manejar su bicicleta sin uno, después de todo la señora Lee lo regañaría si no cuida de su salud física de cualquier manera. Como esa vez que llegó a su casa en un taxi, la mujer había enfurecido porque según, lo podían secuestrar o hacerle algo malo si viajaba de esa manera, tuvo que aguantar todos los sermones que ella le daba mientras Felix se burlaba al lado de su progenitora.
Chan Bang; pertenece a una familia adinerada, su familia es únicamente sus dos padres, un hermano y sus dos abuelos maternos, él es el menor de su familia, su madre Bang Ye-jin, es dueña de la mejor compañía de cosméticos en Seúl, invierte su vida para hacer productos de calidad y completamente naturales, por otro lado su padre Bang Hae-in, es Ceo de una de las mejores empresas de Seúl, sus progenitores siendo muy serios y dedicados a su labor, no tienen tiempo para cuidar de sus hijos como dos padres amorosos harían, después de todo prácticamente ven a sus hijos como dos personas con un uso en particular.
Sus dos abuelos también son millonarios y dueños de los mejores restaurantes que hay en Busan y en las ciudades vecinas. Su hermano mayor Seo-joon, es un joven serio y dedicado, que estudia y se prepara para ser el sucesor de la empresa de su padre como debía ser.
Luego está Chan, la única persona cuerda entre los Bang. Él a diferencia de su familia, no tiene interés alguno en el dinero o en el prestigio. Simplemente le importa divertirse con sus amigos, nadie le impide que se escape de su hogar a media noche sólo para ir a divertirse de una manera poco sana, pero es normal porque es sólo un adolescente hormonal de dieciséis años con ganas de desobedecer a toda costa a sus progenitores, quienes a pesar de castigarlo, parecen no tomarle la mayor importancia.
El pelinegro tocó el timbre de la elegante mansio, sostuvo las cuerdas de su mochila y sonrió cuando la puerta fue abierta por la madre de Felix; Yoo-jung, una hermosa castaña, con una sonrisa suave y amable.
Chan sentía una calidez reconfortante al estar a su lado, la casa Lee estaba llena de calidez y amor, sentimientos bonitos que su mansión enorme no tenía, pues sus padres eran simples y serios que mayormente no estaban en casa.
La mesa de su mansión era grande y todos estaban alejados cuando cenaba juntos, mientras que cuando cenaba con los Lee, siempre estaban juntos y riendo porque el señor Lee comenzaba a contarles todas las anécdotas divertidas que se le ocurrían.
-Chan, querido, pasa - Exclamó la castaña colocándose a un lado para permitirle la entrada a su humilde (pero gran) hogar, lo cual sucedió porque el menor entró haciendo una reverencia.
