1 vío // 𝗻𝗼𝗿𝗲𝗻𝗺𝗶𝗻.

02; el chernobyl

- ¿CÓMO QUE LOS TENGO QUE ENCERRAR? -.

RenJun había llegado a la casa de la Giselle unos cinco minutos antes para ayudar, pero cachó que ya tenía todo listo.

Saludó a la mamá de su amiga justo antes de que ella lo arrastrara a su pieza.

Se le había ocurrido un plan a las tres de la mañana, lo anotó y a penas vió a su mejor amigo cruzando la puerta de su casa, lo "secuestró" para contarle su idea.

Claro que, por su reacción, no parecía muy contento.

- Si po, así va a ser más fácil. -.

- ¿Cómo va a ser más fácil? Van a sospechar si se los pido po. -.

- Es que no van a sospechar náh po. - el RenJun hizo una mueca, claramente no entendía a lo que se refería su amiga - Eso va a ser cuando estén pa' la cagá después de tomar. -.

- ¿Ya y cómo lo vamos a hacer? ¿Los vai' a obligar a tomar? -.

- Nooo po, eso no se hace, voy a inventar juegos en donde sí o sí van a perder, ya vai' a ver que todo saldrá muy bien. -.

RenJun, honestamente, no confiaba mucho en sus palabras.

Es que, emborrachar a alguien y encerrarte con él sería aprovechar el mal estado de una persona, eso es totalmente funable.

A veces realmente se preguntaba como es que ese cuarteto de locas se hicieron sus amigas.
Pero después se acuerda de que él es igual o peor y entiende todo.

De ser las seis se hicieron las nueve, ya estaba llena la casa de su amiga. Caminaba por todos lados buscando a los dos, por un momento pensó que no llegarían, hasta que los vió pasar por la puerta con una botella de ron.

- Weeena cabros, yo ya los estaba dando de ausentes. - los saluda la yisél, dejándolos pasar.

- Se no' olvidó comprarte un regalo, así que a última hora salimo' al super y te trajimo' esto. -.

Jeno le entregó la botella a la cumpleañera, ella la recibio con la mea sonrisa.

Tumba la casa resonaba en los parlantes, la Karina y la Ning bailaban con algunos de sus compañeros, específicamente el Chenle y el Sungchan. De cuatro terminaron siendo ocho ya que se empezó a unir más gente a ese círculo.

RenJun estaba terrible cohibido, se escondió en la cocina por lo nervioso que se puso.

Y eso que todavía ni empezaba el plan.

Abrió el refri y sacó una Mistral Ice.

Se dió cuenta de que estaban re fondias en el fondo.

- Tonta culiá, igual te saqué una. - soltó para sí mismo, aunque amara a esa cabra, era una traición esconder el copete de tus amigos.

- Hola, mi amor. -.

Rodó los ojos al reconocer la voz a sus espaldas.

- Hola, Hyuck. -.

Se dió la vuelta y enfrentó a su ex con la mirada.

- ¿Cómo estai'? Te veo más lindo que antes. -.

- Eso es porque ya no estoy contigo po, Chernobyl. -.

El moreno soltó una carcajada por el apodo.

- Perdóname por haber sido tan tóxico, no te merecíai' eso. -.

- Te perdoné hace caleta, no pasa nada. - agarró el abre latas sobre el mesón y abrió rápidamente la botella - ¿Y tú? ¿Mejoraste con el tema de tus celos o seguí' igual? -.