2: SEGUNDO DIA

17.2K 935 16
                                    

LIA

Dios... que hombre.

- Hola -dice una voz a mis espaldas.

- Hola -digo volteándome

- nueva verdad -dice y asiento- Suerte, adivino te toca el doctor Max.

- Si -digo

- El es el dueño del hospital -dice y me asombro- si yo también tuve la misma impresión al enterarme de eso, pero el es el más duro, te enseña pero a su manera, te hace ver las cosas distintas, eres su única asistente, así que tienes más oportunidad de aprender, como también muchas ganas de rendirte, no lo hagas, ya muchas se rindieron.

- No lo haré -digo segura

- Suerte -dice yéndose

No me rendiré, luchare por mi título.

- Nunca te salgas así -dice el doctor- No lo hagas, primera regla: si yo no te digo que te vayas tú no te vas, oíste.

- Lo siento, pero me interrumpía -digo segura

- ¿Y te dije que te vayas? -dice viéndome y cruzando los brazos,

<<Que brazos.... Dios..>> concéntrate.

- Lia -dice serio- te quiero en mi oficina ahora.

Se va dejándome sola, lo sigo y es imposible ya que su caminar es muy rápido, cuando voy a subir al ascensor cierra las puertas.

Pinche naco.

Espero hasta que el otro ascensor llegue y subo en este, llego a la planta y voy hasta su oficina.

- ¿Te dije pasa? -dice mirandome

- Estaba abierta -digo justificandome

- ¿Te dije pasa? -dice repitiendo

Salgo y toco, escucho un pase, entro y me paro frente a el.

- sientate -dice

- No me tutee -digo

- ¿perdon? -dice

- no me tutee -digo

- lo siento señorita Ricci -dice- Numero uno: no sales si yo no te doy el paso, numero dos: llegas temprano 5 minutos antes, numero tres: no hay preferencia.

- Entiendo -digo

- La proxima semana, será el aniversario de la fundación del hospital, como sabrás vendrán mucha gente y ahí, también colegios y universidades, estarás conmigo a cada momento -dice

- escuche sobre aquello -digo

- Inteligente -dice- Ve a corroborar que la paciente esté bien, y revisa las demás fichas..

Salgo de allí, no me daré por vencida, no lo haré.

***

Por fin, veo el sol o la anochecer.

Me deleito comiendo un sándwich y un jugo de fresa, en la terraza, veo la hora y me falta 15 minutos para regresar.

Llamada entrante

- Hola mocoso.

- Hola tonta, ¿como te ha ido?

- Bien...

- ¿estas comiendo?

- No, navegando por el mar.

- Salúdame a Bob esponja, nah mentira, sabes que solo te faltan meses ¿verdad?

- Lo se, sabes la próxima semana habrá una fundación acá.. -digo masticando mi comida

- ¿enserio? -dice- adivino estarás en el área de pediatría.

- de hecho... no puedo, estaré con mi jefe -digo

- y no te gusta nada esa idea.

- No de hecho... si me gusta, claro!, solo para aprender.

- mientes, soy tu mellizo, y puedo jurar que estos momentos estás apretando el sándwich.

Bajo mi mirada y si, es verdad.

- Pues estaré aprendiendo -digo segura

- Lo dices tal falsamente-dice riéndose- a ti, que te encanta estar con los niños, o hacer cirugías de craneo.

- Es un día nada más, después estaré en las salas asistiendo a cirugías.

- Como sea, ah, el pendejo de tu otro hermano me dijo que te ira a visitar.

- ¿y tú? -pregunto

- A mi venme a visitar, sabes que el hospital no se mantiene solo -dice y es verdad

- Bueno... -digo- ¿y mis padres?

- Mi papá extrañando a su princesa, mi mamá ya lo asimilo ya no te extraña.

- Hey! -digo

- Te extrañamos pecosa, eres la única mujer.

- Entiendo.. bueno me tengo que ir.

- cuídate.

- Chao te quiero.

- Te quiero pecosa.

Cuelgo.

- Ya es hora ¿no? -dice una voz a mis espaldas

Aquí estuvo Ale

ENTRE NOSOTROSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora