Capítulo: uno

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― Dios.... las Jenner cada vez están como quieren ― dije mientras veía la nueva publicación que estaba la menor de las Jenner posando con bikini.

― Mi esposa está mejor ― habló Justin mientras levantaba algunas pesas.

― De eso tienes razón hermanito ― comenté mientras me metía en su perfil y le daba like algunas publicaciones que tenía en su perfil.

Estaba a punto de hablar cuando solo siento un objeto golpear mi cabeza. Veo el objeto que cae aún costado mío viendo una botella de plástico que menos mal estaba vacía.

― ¡Hey! ― dije mirando a Justin que por su parte tenía una sonrisa en su rostro.

― Eso te pasa por hablar de mi esposa.

― Lo siento lo siento, no comento nada más te lo juro ― dije yendo hacia el espejo y me saco un par de fotos.

Justin se cola y sale aún costado mío posando, hacíamos poses totalmente épicas, pero algunas sólo eran graciosas. Abro la app de Instagram y tecleó un par de fotos para luego poner; mi mono con tatuajes y un corazón.

Publicado

Dejo mi teléfono y seguimos ejercitando, estuvimos haciendo ejercicios unos 30 minutos más o menos para luego ver a las chicas llegar.

― ¿Cómo les fue? ― habló Justin mientras ayudaba con las bolsas.

Por mi parte Kendall se me tira encima y yo le agarro de su trasero. Caminamos dentro de la casa mientras sentía los besos de Kendall en todo mi rostro y cuello. La morena me da un corto besos en mis labios y se baja encima de mí, me siento en los sillones viendo como Hailey veía las cosas que se había comprado.

― Mi amor, tienes diez pares de zapatos. No sé para qué quieres más ― habló Justin mientras veía que la rubia saca dos cajas de zapatos haciéndome reír.

― Tendrás que dejar tus cosas en la cochera si sigue así ― comenté viendo a mi hermano.

El rubio solo me muestra su dedo del medio, sacando mi lengua en protesta.

― A una mujer no le importa cuántos pares de zapatos tiene, pero no le hace daño a nadie. ¿Verdad ________?

― Concuerdo contigo, así que te doy permiso para que compres muchos pares de zapatos más. Solo ignora a mi hermano, él no sabe nada de moda ― dije viendo a la rubia.

Hailey mira a Justin y levanta las cejas con una sonrisa. Miro detrás de ellos y veo a Kendall haciéndome señas, me pongo de pie y camino hacia la morena. Entramos a la cocina e inmediatamente Kendall me estampa contra el refrigerador, atacando unos segundos después mis labios.

― No sabes cuánto le rogué a Harley que terminara las compras ― habló a medida que bajaba sus labios hacia mi cuello cerrando mis ojos por unos segundos.

Sin protestar giro mi cuerpo quedando ella debajo de mí, nos empezamos a besar sin descaro. Con Kendall no éramos nada, éramos como amigos con derechos. Algunas veces teníamos sexo y a veces solo gozamos de nuestra dulce compañía.

― Mierda ― susurré al sentir como mordía mi labio inferior teniendo una sonrisa la castaña por su parte.

La tomó de los muslos y camino hacia el mueble, besó sus labios por unos segundos para luego bajar hacia su cuello. Sigo el camino de mis besos hacia su falda que gracias a Dios no tenía botones. Estaba a punto de levantar su falda hasta que siento la puerta abrirse violentamente.

― ¡N-no tengo ollas Kendall! ― hablé fuerte mientras me colocaba de pie y enderezaba mi espalda.

― Oh no, qué triste ― contestó Kendall haciendo una expresión de tristeza.

Giro mi vista y veo a mi hermano con una sonrisa en su rostro, dándome ganas de pegarle y algo me dice que se va a burlar por el resto de mi vida.

― Solo venía a decirles que la pizza ya llegó y está todo listo ― habló Justin mirándonos viceversa.

― Iré ahora ― dijo Kendall a medida que se bajaba del mueble y caminaba hacia la salida, quedando yo y Justin solos.

Solo suspiro y empiezo a seguirla, antes que pudiera salir de la cocina siento la mano de Justin tomar mi brazo.

― ¿Ollas? ¿Es en serio? ― preguntó burlón.

― Cállate Justin, no seas pesado ― hablé zafándome de su agarre para luego caminar a la sala de estar.

― Y dime ________, cuando sacarás el primer tema de tu música ― habló Harley.

― Mi primer álbum saldrá en una semana, y el mismo día tengo una entrevista ― dije tomando una rebanada de pizza.

― ¡Es en serio! ¿Por qué no nos los dijiste? ― comentó Kendall.

― ¡Sorpresa! ― comenté subiendo mis manos viendo la expresión de Kendall ― Me enteré hoy, el director del programa me llamó hace dos horas -

― Eso es una excelente noticia ― habló Justin.

― Deberíamos celebrar ― comentó Harley a lo que yo asentí ― Vamos mañana a la discoteca, vamos nosotros y un par de amigos más ¿Qué te parece? ―

― Si hay música y alcohol yo le entro ― hablé subiendo mi mano.

― Yo también ― apoyo Justin.

A la discoteca será.

¡Púdrete Bieber! / Madison Beer y tú G¡PWhere stories live. Discover now