Bad Love (Izana Kurokawa)

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De lo que sería capaz por ti...

Izana Kurokawa, segundo al mando de Bonten, ese chico era todo lo que estaba mal en el mundo. Los hombres como él eran hombres de trabajo, ¿Quién  puede imaginárselo como amante ? Muy alejado de lo que mucha gente cree a él no le importan, o  eso quiere hacer creer. Los hombres como él son malos, no van a cambiar porque el amor llegue a su puerto, Izana está vacío y así siempre será, incluso si (...) apareció en su vida para amarlo ella no puede llenar un vacío que existió antes de ella y que aún con ella no se puede llenar, ella era suya pero nada más.

Rondaba la noche, la casa grande estaba iluminada únicamente en la cocina porque ahí se encontraba (...) con lágrimas en los ojos picando cebolla.
Izana entró a la casa, no saludó. La mujer le dio la bienvenida sin voltear, él iba a seguir su camino hasta su cuarto porque (...) no era lo más importante en su vida pero se detuvo. Se acercó a escasos centímetros de ella quien aún seguía dándole la espalda secándose rápido y sin llamar la atención sus lágrimas.

Izana movió un poco la cabeza, con el tono normal de su voz le preguntó:—¿Estás llorando?

—N-No, no es eso...B-Bueno es que—Suspira mientras su voz sale temblorosa—Creo que es un comienzo de gripe, no te acerques tanto.

Izana le dio sorpresivamente la vuelta poniéndola de frente hacia él. Sus ojos se mantenían hinchados. Volteó hacia otro lado porque no podía sostenerle tanto la mirada al intenso de Izana quien buscó su mirada como león con su presa, ante su actitud ella no tuvo más opción que confesar:

—Sí—Dijo con la mirada en el piso—Pero es por la cebolla.

—Mentirosa...y muy mala—Se acerca y la toma de la barbilla—¿Quién te crees para mentirme? ¿No te das cuenta que te conozco más que nadie en el mundo?

(...) bajó la mirada y lloró, ocultó su rostro en el pecho de Izana quien se mantuvo frío. Él no era de muchos sentimientos, no le salía y tampoco le daba la gana de fingir.

—Es que...

Izana la miró:—¿No lo entiendes? Eres mía, eres mi problema, no puedo permitir que lo mío no esté bien.

La mujer no podía casi ni hablar, era de esas que la voz salía totalmente quebrada por el sentimiento de tristeza. Se limpió la nariz, se apartó de Izana y se sentó en una silla cabizbaja para poder hablar.

—Reprobé Anatomía—Dijo aún llorando—Sé que es una estupidez, lo sé...pero...es que...no tienes idea de lo mucho que me esforcé...al principio, al inicio del ciclo pensé que no podía ni servía para eso, era demasiado duro y aún así no me rendí, nerviosa y sin autoestima continué...me fue mal en el primer examen, después ocurrió lo de mi ingreso al hospital y cuando salí—Miró a Izana con ojos llorosos—Salí con todas las esperanzas del mundo dispuesta a esforzarme todavía más para el segundo parcial y aún reprobando el segundo continué avanzando. En el tercero me fue muy bien pero me faltaban dos puntos—Izana la miraba sin expresión, ella continuaba—No era la única que necesitaba puntos para pasar. Pero si la única a la que no se los regaló, es decir—Vuelve a bajar la cabeza—No tenía la obligación de hacerlo pero ¿Por qué la gente tiene que ser tan dura con los demás? ¡Sé que es una estupidez! ¡Pero me esforcé tanto y para nada! Me duele...

—Sí es una estupidez...

(...) secó las lágrimas de sus ojos con sus propias manos:—No importa—Dijo, no quiero molestarte con mis tonterías.

—Entonces no lo hagas—Dijo Izana mientras le daba la espalda—Tengo muchos asuntos que resolver, no puedo quedarme aquí a consolarte sólo porque te reprobaron—Y se fue.

Ese era Izana en todo su esplendor. No tenía ganas ni de enojarse por su actitud, ¿Qué opción tenía? El gangster había posado sus ojos en ella desde que la vio por primera vez caminando en su territorio y desde entonces marcaría su destino apropiándose por completo de ella. No le importaba, Izana se había convertido en todo para ella.

Organizó la cocina y tras una ducha caliente se fue a dormir.

Eran las 7:30 am cuando despertó. La alarma que había olvidado quitar de su celular la despertó escandalosamente, ella la apagó y con la intención de volverse a dormir se sorprendió cuando en la cama en frente suyo estaba Izana mirándola con una sonrisa.

—Izana...me asustaste.

—¿Qué haces despierta tan temprano?

—La alarma...

—Ya veo.

—¿Acabas de llegar?

—Tenía asuntos que resolver.

—Ya veo. Ojalá todo te salga bien y...vuelvas a mi lado como siempre.

—¡Oh!—Acarició su cara—¿De verdad que me amas demasiado, no es así?

—Sabes que sí.

Izana no dijo nada más, le dio la espalda dispuesto a terminar la conversación, (...) lo abrazó desde atrás dejando caer su barbilla en el hombro de su hombre.

—Por cierto—Habló Izana—¿Cómo te fue en este cuatrimestre en la universidad?

—No muy bien—Respondió—Ayer te dije...reprobé anatomía.

—¿Me dijiste?

—¿No te acuerdas?

—Seguro lo soñaste.

—No lo soñé, es que tú casi nunca me haces caso.

—Te digo que no...¿Por qué no revisas las calificaciones otra vez? Sueles soñar cosas y después creer que los sueños son reales, a lo mejor sólo fue un sueño.

(...) estaba demasiado segura pero Izana le insistió así que sin más remedio entró a la pagina para ver sus calificaciones otra vez. Su cara cambió de color,  Anatomia estaba en A.
Tapó su boca con la mano casi sin poder creerlo, miró a Izana todavía sorprendida.

—¿Lo ves? Eres la chica más lista del mundo, después de todo eres mi mujer.

(...) abrazó a Izana con fuerza, iba a besarlo hasta que cayó en cuenta de algo.

—Izana...¿Tuviste algo que ver?

—Tranquila—Acarició el pelo de (...)—A ti nadie te puede hacer llorar, nadie más que yo, aquel que se atreva lo pagará muy caro.

Y claro que la hizo pagar muy caro, después de obligar a la Dra. Profesora de anatomía de (...) a cambiarle la nota, la asesinó  cruelmente haciendo desaparecer su cuerpo. Podía fingir que estaba molesta por lo que su esposo había hecho, pero a pesar de todo ella sólo veía el gesto demasiado encantador de cómo Izana se atrevió hacer todo aquello sólo por ella, él era malvado, no iba a cambiar por ella, pero por ella podía cometer los actos más atroces porque esa era la forma en que él le demostraba su amor.

Tipos de novios, Tokyo RevengersDonde viven las historias. Descúbrelo ahora