Capítulo 2: ¿Dónde estamos?

133 10 14
                                    

Nuestros protagonistas llevaban caminando un rato cuando se dieron cuenta que estaban más perdidos que un pulpo en un garaje. No había ninguna indicación así que estaban como cuando fueron juntos al concierto de Chayanne, que estaba plagado hasta los topes  y no se podía ver nada. Al cabo de un rato, a Licorice se le acabó la paciencia y gritó:

-¡Vaya maldita mierda basurera de lugar!-

-Ya te digo.- Contestó Espresso.

Siguieron caminando y llegaron a una especie de sala que debía de ser algo así como el lugar de los congelados. Iban caminando cuando entonces Licorice se encontró algo en el suelo.

-¿Qué es esto?- Preguntó.

-Hmm... Parece un lazo.- Observó Espresso.

-Sí.-Respondió Licorice.

-Busquemos a su dueña.- Dijo Espresso.

-¡ESPERA ESPRESSO! ¡Aquí pone algo!- Exclamó Licorice.

A continuación, Licorice leyó lo que ponía:

"En caso de encontrar este lazo, por favor diríjase a la calle "Chayanners de pura cepa" portal 5, piso 5 Z y llame al timbre. Muchas gracias, y la devolución será recompensada."

-No puede llevar mucho tiempo, sino alguien se o habría llevado o estaría sucio.- Observó Licorice.

-Yo estimo que debe llevar aquí cinco minutos o así.- 

-Tengo una idea, saca una foto al lazo con tu teléfono y nos separamos y vamos preguntando a la gente. Luego nos reuniremos aquí de nuevo.- Explicó Licorice.

-Ok.-Respondió Espresso.

Licorice fue por la izquierda y Espresso por la derecha. Licorice empezó a caminar cuando entonces:

-¡Mi lazo! ¡Oh dios mío, lo has encontrado!-

Una galleta emo muy mona de pelo rubio, ojos verdes y un vestido marrón oscuro casi negro y adornos color crema se acercó a él, muy emocionada. 

-Muchísimas gracias por encontrarlo. Yo soy Panettone Cookie y es mi lazo, muchísimas gracias por encontrarlo.- Dijo la galleta.

-Esto... yo soy... Licorice Cookie... es un placer... ehm... no ha sido nada.- Respondió Licorice.

Licorice se puso más rojo que un tomate aunque con la capucha y el pelo no se notaba mucho.

-¿Como podría agradecértelo?- Preguntó la galleta, nerviosa.

Entonces, Licorice tuvo una buena idea.

-Esto... bueno... mi amigo Espresso y yo... encontramos el lazo y... bueno... estamos muy perdidos porque han renovado esto... ¿Quizás podrías venir con nosotros y ayudarnos a no pasar el resto de nuestras vidas aquí?- Dijo Licorice.

-¡Por supuesto!- Exclamó Panettone.

Entonces, Licorice y Panettone volvieron a donde habían quedado con Espresso. Solamente tuvieron que esperar un minuto porque enseguida apareció Espresso.

-¡Ahí va! La has encontrado.- Exclamó Espresso.

-Sí, esta es Panettone Cookie, Panettone, este es Espresso, mi mejor amigo.- Les presentó Licorice.

-Encantada.- Dijo Panettone tendiéndole la mano.

-Es un placer.- Dijo él.

La galleta misteriosa seguía ahí escondida observándolo todo. Cuando se fueron la galleta susurró:

-Bueno, bueno, hasta mi propia prima me traiciona. Hora de afilar el cuchillo.




Licorice Cookie va al Mercadona 2Where stories live. Discover now