Capítulo XII: Para la tía Mitch.

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La fiesta había terminado y nadie sabía, a ciencia cierta, qué mierda estaba pasando o había pasado.

Thérèse fue sacada en una ambulancia debido a que se rompió el brazo cuando un guarda, de cien kilos, le cayó encima.

Olive, Cristopher y Eugenia, veían la escena de los camilleros llevándose a una notablemente irritada Thérèse desde la otra esquina.

—Bien, salió mejor de lo que esperábamos.— Dijo Cristopher mientras se tomaba un sorbo que contenía la botella de vino que sostenía en su mano derecha.

—Debes de estar bromeando. ¿Verdad?— Dijo Olive girando su cabeza para lanzarle una mirada amenazadora a su mejor amigo.

—Yo estoy con el alcohólico, todo salió bien.— Eugenia alzó los papeles que aún aferraba como si su vida dependiera de eso.

—A todas estás... ¿Quién eres tú?— Preguntó Cristopher.

—Soy la vecina.

—¿Eh?— Cristopher alzó su ceja.— ¿Es algún chiste francés o algo así?— Preguntó a Olive.

—oh... es la novia de Zelda.

—No, no somos novias.

—Está bien...— Olive suspiró y miró a Cristopher.— Es con quién se acuesta últimamente Zelda.— Volvió a mirar a Eugenia para señalar—Mis disculpas, mademoiselle.

—¿Y tú le dijiste nuestro plan extremadamente peligroso a la mujer con la que se acuesta Zelda?

—Y es su vecina.— Señaló Olive.— Es la única amiga que tiene.

—¿Por qué sabes tanto de las andanzas de Lilith y Zelda?— Cristopher cruzó las manos y miró con detenimiento a Olive.

—Sí... ¿Por qué?— Eugenia hizo lo mismo.

—Tal vez haya investigado un poco ...

—¡Eso es ilegal!— Señaló Eugenia.

—Oh vamos, era claro que no me dirían en lo que habían convertido su vida. Hice muy bien mi tarea.

—Ahora dilo en frente de un psiquiatra.— exclamó Cris.— ¿Y cuando se supone que iba a saber que la británica iba a salir corriendo con los papeles?

—Eso fue total improvisación...

—Olive se me acercó cuando todos estaba distraídos con los vestidos y los paparazzis... Así que subí a la única habitación sin custodias. Porque ... ¿Quién cuidaría unos papeles oficinistas?

—Está bien, Agatha Christie. Ya entendí.— Dijo Cristopher tomando otro sorbo.— Bienvenida al equipo, o alguna mierda así.

Los tres volvieron a ver cómo la ambulancia se iba con Thérèse.

—Se lo merece esa perra.— Dijo Olive viendo como se perdía la ambulancia en la calle.

—Amén.— respondió Eugenia y Cristopher mientras éste le pasaba la botella a Eugenia.

Su mirada entonces cambió de seguir la ambulancia a ver cómo Lilith y Zelda salían casi levitando con sus vestidos y cruzaban la calle.

—Eugenia.— Dijo Zelda al verla allí.— No sabía que estabas aquí.

—Soy parte del equipo.— Sonrió inocentemente Eugenia.

—Bien, que esté la amante también.— Respondió Lilith suspirando.— El poliamor fue siempre lo mío.

—¿Ah sí?— Zelda cruzó sus manos.

Lilith solo se limitó a sonreír.

—Realmente necesitan tener sexo.— Respondió Eugenia señalándolas con su dedo índice.

Red Poison. 🌈🦋[ Madame Spellman fanfic] (AU)Where stories live. Discover now