Capítulo XXI: Young Folks.

293 51 106
                                    

NA: estamos llegando a recta final de esta historia y yo ya me puse nostálgica..
.
.
.
.
.



Olive y Zelda no sabían qué mierda estaban esperando en el pasillo del edificio. Pero lo cierto era que tenían un nerviosismo ascendente que les creaba nudos en sus estómagos.

Lilith había pedido que le dejasen sola con su madre. ¿Y cómo no hacerle caso? No era lo más sensato, pero para sobrevivir bastaba. Zelda miraba a la infinita nada pensando de cuántas maneras podía vengarse de Fausto. Olive, en cambio, jugaba con el anillo de bodas que reposaba en su dedo anular.

Cuando Zelda se cansó de matar a aquel hombre en cien situación diferentes, apoyo su oreja en la puerta del apartamento.  No había ninguna señal: ni de vida ni de muerte, porque uno nunca sabe.

—Vaya...— Zelda suspiró.— Y yo pensé que esta noche terminaría diferente.

—¿Cómo te la imaginabas?

—¿Mm?

—Tu noche.— Rectificó Olive.

—Oh...— Zelda no sabía que decir ya que fue más un pensamiento en voz alta que, realmente, una conversación Olive.— Bueno, me hubiese gustado una copa de vino, una ducha después de... Ya sabes, y hablarle de mi decisión a Lilith.

—Realmente siento haber entrado así, debí estar más alerta.— Olive creyó necesario disculparse por su intromisión anterior.

—Al menos tú solo entraste. Thérèse estaba literalmente al lado nuestro.

—Si te digo porqué estaba ahí, no me vas a creer.— Olive destensionó su rostro para reírse con mucha gracia de lo que había hecho Thérèse.

—¿Por qué estaba allí? Ahora tengo curiosidad.

Olive calmó su risa y con tono calmo agregó:

—Porque sabía que Lilith se enojaría tanto con ella, que era muy probable que jamás volviera a estar allí. Así que ...

—¿Estaba en su cuarto guardando recuerdos?

—Así es.

—Perdóname Olive, pero tengo que ser un poco escéptica en ello.

—¿Por qué?

—Es como si me hablaras de otra persona.— Zelda cruzó sus manos incrédula.— La Thérèse que yo conozco no haría algo así y mucho menos por Lilith.

—¿Cuál es la decisión tan importante que debes de comentarle a Lilith?

—¿Que?— Zelda no entendía aquel cambio tan abrupto de tema.

—Sí, eso que le dirías hoy a Lilith en tu noche perfecta.

—Oh, bueno... Le diría que quiero mudarme con ella.

—¿Hablas de regresar a vivir juntas?

—Así es.

—¿Eso mismo le habrías dicho a la Lilith que conocías hace cinco años? Y sé sincera, por favor.

Zelda suspiró.

Red Poison. 🌈🦋[ Madame Spellman fanfic] (AU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora