Dio y giorno brando

72 6 3
                                    

Allí estaba ese maldito rubio alfa que siempre se la jugaba con la ley, Dió Brando coqueteandole a Bruno y al lado de el su fastidioso niño Haruno, aunque actualmente se llamaba giorno, a él no lo engañaba esa cara angelical de niño bueno era un dolor en las bol-

Bruno hizo un mechón atrás sonrojado por el cortejo del alfa, era suficiente para que leone interrumpiera aquel cortejo pero fugo lo atrajo a la tierra del lugar de los celos
—esta bien si nos llevamos unas orquídeas? Le darían un buen aspecto al jardín de la casa—
— si.... Ya vamos panna la comida debe estar lista—

Con esto compro las orquídeas del menor, en realidad panacotta quería regalarle una a narancia y otras para el jardín, leone se trago la bilis con un aura intimidante los y las omegas huían de el por su aroma tan pesado hasta llegar a su casa

—bucciaratti, pensaste en casarte alguna vez?—
— por favor padre no empieces—
El rubio menor giro los ojos cansado de aquella situación que ocurría cada vez que iban a la sección de flores por algunas hierbas u flores para su jardín personal y además de aveces admirar al hijo de este, aquel peculiar alfa que le llamaba la atención aunque ese día no había compañado a su padre
—por favor señor Brando,no, no he pensando ni me casare de nuevo—
El rubio bufo ya que su cortejo era insistente con el de melena aún así siguió con ello
— y por qué no? Eres un Omega bello y mereces ser apreciado como un alfa como yo—
—me alaga señor Brando pero creo que tengo que rechazar su oferta—
Le entrego las semillas y abono al menor con una cálida sonrisa
— aquí tienes giogio, espero verte aquí la próxima semana—
—lo mismo espero señor bucciarati, andando padre—
Ambos rubios se despidieron de bucciarati y el continúo son su venta normal hasta regresar a casa donde estaba nuevamente el albino y narancia emocionado por la flor que le habían regalado, en cambio mista se encontraba jugando en aquella play 4 que les había regalado hace unos años, le saludo al rubio de nombre fugo y le ayudo a narancia a plantar aquella flor en el pequeño jardín que tenían atrás, este sentía la calidez en su hogar y se puso a preparar un pequeño postre que sería algo de orchata para el y sus hijos, a ellos les encantaba la orchata

—entonces pannacotta de dónde vienes?—
—de la cdmx—
— valla! Viene de la grande mista!—
Narancia le jalo el brazo a su hermano quien estaba concentrado en el juego
—no hagas eso nara! No me sorprende que los citadinos ahora pasen por aquí—
El moreno se soltó del agarre y siguió jugando mientras que narancia se trepó en el brazo de panacotta Con una sonrisa juguetona como la de un niño
— entonces que te trajo por aquí güero?—
Pannacotta se sorprendió pero rió al ver su actitud infantil
— "mi padre" fue trasladado aquí por trabajo por falta de un comandante y pensaron que era la mejor persona para encargarse del pueblo—
— ah! Tu padre es el nuevo comandante? —
— así es—
A narancia le brillaron los ojos por la emoción al imaginar La cuidad principal era emocionante y panacotta noto esto
— no te emociones Nara, no es nada interesante—
Suspiro cansado
— la ciudad es muy agetreada la verdad, muy pesada además de bastante delincuencia—
— bueno ni conoces a los cholos de por aquí panna así que no te culpo—
— Nara tiene razón fugo, los cholos de aquí son bien canijos—
Pannacotta no sabía cómo eran los cholos del cerro así que se encojio en su lugar mientras que Bruno seguía en aquella cálida cocina terminando de preparar la orchata fresca para los niños, una vez que terminó llamo a los muchachos invitándolos a la mesa de la cocina, sirvió la orchata en los 4 vasos, los muchachos se sentaron, entre empujones mista y narancia se sentaron, mientras que fugo se sentó con calma, Bruno se dispuso a limpiar todo lo que había echo uso,mientras que los chicos seguían haciéndole preguntas al albino

Este respondia aveces con paciencia y aveces no, hasta que narancia recibió una llamada de su buena amiga la pelirrosa, quien justo estaba de paso por la casa del mayor, quien salto de alegría corriendo hacia la puerta, abrió y allí estaba su lujosa amiga, una linda omega, quien siempre vestía a la moda, gracias a sus padres aunque había ciertos rumores sobre este matrimonio, aún así narancia y Trish eran buenos amigos, tanto que aveces Trish solía quedarse en la casa de este, a bucciarati le encantaba la compañía de la chica, quien era adorable para su opinión y aveces mista trataba de cortejarla, aunque no se daba debido a que eran personas opuestas
— naranjita! Gracias por abrirme cariño, quise pasar un rato para verte a ti y a guido—
— ay Trish siempre considerada, estoy pensando en casarme contigo—
— ay nara, yo te mantengo—
En eso bucciarati salió de la alacena y saludo a la joven con mucho entusiasmo haciéndola pasar a la cocina dandole el vaso de orchata, la joven retiro sus lentes de sol y examinó a panacotta
— te conozco?—
— creo que te conozco de algún lugar, pero no lo recuerdo, de todos modos soy fugo pannacotta—
— soy Trish Una vinegar—
— uy panna su nombre es más largo, mejor ni le preguntes—
Guido y narancia se fueron mientras la pelirrosa le daba un sorbo a su orchata, felicitando a bucciarati por lucirse nuevamente
— ay nara, venía a sacarlos hoy de paseo con Guido y ahora tal vez a tu nuevo amigo—
—uhhhh a dónde vamos Trish!—
Nara golpeó la mesa entusiasmo lo cual hizo que pannacotta se atragantara por un momento
— giorno nos invitó a una pijamada, ya sabes con esto de que su rancho ya está terminado—
Guido miro a narancia, ambos emocionados, según los chismes (osea gracias a prosiutto y giachio) ese rancho era el más grande de todo México, por lo cual era del tamaño de una ciudad y lo habían llamado "the world" por lo grande que era, Nara se lanzó a los pies de su papá y Guido lo siguió
— papá déjanos ir a la pijamada! Por favor! Tenemos que confirmar si hay un establo de ponys!—
— si papá, déjanos ir y te juro por esta— Guido junto sus dedos besando estos y se los enseño a su papá— que te limpiamos toda la casa por una semana—
— bien bien, pueden ir, Trish cariño a qué hora podrían volver mañana?—
— puedo decirle e cioccolata que les dé un aventón a eso de las 12 o 1—
— perfecto, estarán aquí para comer—
— esperen que hay de fugo?— narancia señaló al albino quien seguida disfrutando de su orchata
— puedo decirle a giorno, aunque no creo que tenga problemas—
Narancia salto hacia fugo cuál gato y este se tuvo que agarrar de la mesa para no caerse
— fugo! Podrás ir con nosotros! Además no seas amargado! Podrás conocer a giorno es igual de inteligente que tu— panna suspiro y asintio
— supongo que podría preguntarle a mi papá—
Los jóvenes saltaron de alegría, sin saber que aquella noche podría cambiarlo todo en sus vidas

𝓛𝓪 𝓑𝓲𝓴𝓲𝓷𝓪Donde viven las historias. Descúbrelo ahora