ʜᴇʏ ¡! i'm Yukio
one shot's about Caitlyn and Vi by Arcane.
Datos ¡!¡ ♡
- Relatos de origen propio.
- Creditos hacía Ash Brannom, Christian Linke por respectivos nombre mencionados.
‐ Contenido exclusivo para fanáticos
- Contenido de tipo lesbic...
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- Cómo te llamas? - exclamó inquieto
- Matilda, pero puedes llamarla cómo tu quieras - la miré de reojo junto a ese chico tímido llamado "Pin" para seguir con mi camino hacía la oficina de la jefa del burdel cuál entré con Caitlyn para sacar información sobre Silco y Powder.
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No pasaron ni unos minutos para recibir toda la información que quería de la mujer que estaba en esa oficina con olor a perfume fuerte con una mezcla de cigarrillo. Me levanto del sillón hacía la salida, corriendo la cortina que tapaba la entrada al lugar.
Salí del lugar con un sentimiento de impotencia por Silco, rabia por los habitantes de Zaun al intentar detender al sujeto que no paraba de rondar en mi mente y pena por Powder, por no saber dónde estaba. Caminando por los pasillos del burdel, directo a la salida escucho risas y charlas de parte de dos mujeres en una de las habitaciones, me asomó a ver y era nada más ni menos que Caitlyn hablando con una chica morena que poseía una túnica celeste en su refinado cuerpo. Golpeo con la palma de mi mano la pared de la habitación y veo a Caitlyn sobresaltar, se queda perpleja por unos segundos intentando modular algo de su boca pero sólo hago señal con mis dedos que venga hacía mí, me hace caso y nos juntamos en el pasillo.
- Al final, era mujer y no hombre? - exclame
- Bueno... Pin se había ido y esa chica morena me llamó a donde estaba ella, asi que no me negué y fui donde me llamaba.
- Pero, se veían cómodas juntas, de hecho te ví siendo algo dominante en la charla - suelto una pequeña risa antes de levantar mi vista para mirarla.
-sí, era y es atractiva, no lo niego. Lograste conseguir información sobre Silco? - me preguntó
- sí, bombón. - la tomo de los hombros y la llevo a la pared que está a su derecha, encerrandola con mis brazos para mirarnos cara a cara. - tengo una idea - exclame.
- ah sí? cuál - me dijo susurrando. Antes de jalarla a una de la habitación que estaba a su izquierda miré si había alguien por el pasillo, izquierda y derecha, efectivamente no había nada ni nadie. Tomé el brazo de Caitlyn apretandolo suavemente para meterla al dormitorio, cerré la puerta y hablé.
- tienes bonito cuerpo, similar a chicas a las que trabajan en este lugar ¿no crees? - mencioné - es simple, te haces pasar por una para ser yo tu clienta y te doy la información, sólo sí quieres.
