Capítulo 15

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En un mes podían pasar muchas cosas, era lo que siempre pensaba ella, las circunstancias no podían cambiar su rumbo, la línea del tiempo no podía ser alterada, simplemente, no podía cambiar el hecho de que el destino no se podía quebrantar, por lo tanto, estaba decidida a recurrir a esa alternativa que se le había puesto enfrente. Charlie no podía y no tenía la iniciativa de interrumpir una boda, dejaría que las cosas siguieran su curso, por mucho que su corazón se estrujara, por más dolor o sufrimiento que se sumara a su vida, no tendría el valor para destruir una vida próspera para ellos dos, por lo que no sería participe de ese enlace.

Taehyung había batallado para convencerla de no irse, le había puesto millones de excusas para evitarlo, incluso, hizo uso de sus padres para sacarle esa absurda idea de la cabeza, pero era demasiado tarde, ya había hablado con ellos y estaban de acuerdo con su decisión, además, Charlie no estaba del todo contenta con su mejor amigo, su traición la empujaba a aferrarse a regresar al extranjero, o irse a otro lugar lejos para iniciar de nuevo, sin embargo, Tae le había comentado algo y tenía razón, donde quiera que estuviera... ¿Dejaría de amarlo? Quizás, con la huida del país se apartaría físicamente de él, pero, ¿Y los recuerdos? ¿Qué pasaba con todo eso que le recordaba a Jeongkook? La perseguiría hasta por debajo de las piedras, no descansaría por el sentimiento de culpa al haberlo dejado ir por tercera ocasión, el corazón le reprocharía el no haberlo recuperado, porque, tanto Charlie como ese mismo, amaban mucho a ese hombre, estaban conectados por un motivo, en ese caso, por un ser, y si uno se rehusaba a continuar...

Ambos colapsarían.

De amor nadie moría, lo tenía claro, aunque, siendo sinceros, sabía que era su destino, lo presentía, y si no se atrevía a amar a alguien más, era debido a que no llegaría a quererlo como lo deseara. Ya había alistado sus maletas, esa vez viajaría sola, aunque Taehyung hubiese insistido en acompañarla, Charlie declaró que necesitaba hacerlo sin él, ya que no quería seguir arrastrándolo y apartarlo de su familia, solo sería una temporada, al menos, mientras se llevaba a cabo la feliz boda y se recuperaba, pero era por tiempo indefinido, ¿Cuánto le costaría poder superarlo? Tal vez nunca lo haría, pero aprendería a vivir con ello.

— Es todo. Terminé. —suspiró cansada y se tiró en la cama.

— ¿Cuándo te irás? —dijo en la puerta, mirando el espacio vacío con pesar— Dime que no será pronto.

—Negó— En unos días. Aun debo arreglar lo de la galería, hablar con Lisa y despedirme de mis padres.

Agachó la mirada y empezó a patear al aire, no soportaba la idea de separarse, eran el dúo perfecto, la dupla maravilla, por más que quisiera aguantar y mostrarse tranquilo, no podía, la pérdida era mayor, Charlie se iría sin él y no imaginaba el tiempo sin su presencia, sería un enorme hueco, ¿A quién le haría la vida de cuadritos? No tendría con quien divertirse, y eso originaba un nudo en su garganta y no quería hablar, si lo hacía, se soltaría a llorar.

— ¿Y de ellos?

—No, prefiero que lo sepan cuando ya no esté. —ladeó la cabeza, tratando de entender la actitud apachurrada de su amigo— ¿Qué te sucede? Si te preocupa que no me despida de ti, no te apures, lo haré. ¿Cómo podría dejar de lado a mi hermano?

— Quisiera que no. —sorbió por la nariz— ¿Qué hay de Namjoon? Hace días que no sabes de él.

Él había prometido alejarse y lo estaba cumpliendo, tampoco le escribía o le llamaba, iba muy en serio eso de reflexionar, no tenía momento de regresar, después de todo, estaba mostrando esa madurez que había adquirido con el paso de los años, solo pedía verlo una vez, aunque fuese un rato para despedirse.

Cómo pedía que el viento que soplaba fuera se llevara todo eso que le causaba daño, que purificara su vida, que le diera esa tranquilidad y poder irse sin ningún desasosiego, que eliminara toda esa pesadumbre con grilletes que la ataba y le impedía continuar, y así, dejara lo más hermoso. ¿Se arrepentía de haber amado? ¿Había algo de lo que deseaba deshacerse? ¿Rogaba porque el recuerdo de ese amor se borrara para siempre? Por supuesto que no, ¿Qué clase de persona podía vivir sin esos recuerdos? Eran momentos que se entrelazaban y que incluían a personas muy valiosas, no todo se basaba en Jeongkook, aunque, en la mayor parte existía, no quería decir que lo demás fuera desdicha.

Me Equivoqué, Perdóname | Libro #2 | CR. ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora