0 3 ; Reforzando la amistad

3.3K 447 130
                                    

Naoto intentaba con todas sus fuerzas no lucir molesto pero realmente no podía controlar muy bien sus emociones, apenas era un pre adolescente.

Miraba con odio a Mikey y Mikey no se quedaba atrás.

Ambos estaban teniendo una intensa batalla de miradas, las demás personas en el restaurante miraban con miedo a esos chicos parecían que en cualquier momento uno saltaría a matar al otro.

La batalla sólo se detuvo cuando Takemichi salió del baño.

—Disculpen la tardanza chicos — dijo el albino sentándose al lado del rubio quien al instante pasó su brazo por sus hombros — No sé porque había fila.

—Nah no te preocupes, Takemitchy. Aproveché y pedí omaurice.

—Odio el omaurice — dijo Naoto fulminando con la mirada a Mikey.

—Pues debiste decirle antes mocoso.

—Te lo dije y no me escuchaste.

—No escuchó cuando me hablan de forma insolente.

Takemichi suspiro, la verdad no entendía porque esos dos no se llevaban bien. Pensó que tendrían una linda amistad ¿Los polos opuestos se atraen no? Suponía que en este caso ese dicho no aplicaba.

Le dió un sorbo a su malteada y luego tomó una cuchara para proceder a darle de comer a Mikey.

Naoto miró con indignación esto.

—¿No puedes comer sólo? Qué inútil — soltó con tono venenoso.

Mikey le sonrió falsamente y masticó orgullosamente.

—Naoto basta no seas así con Mikey-kun, tú también me pedías-

—¡Cállate! — las mejillas del azabache se encendieron.

Mikey alzó una ceja pero decidió ignorar ese comentario.

Su platillo favorito y Takemitchy eran una combinación asombrosa, todo su mal humor se fue.

El albino empezó a platicar con Mikey de vez en cuando Naoto participaba pero siempre terminaban en las mismas peleas tontas de siempre. Cuando Mikey termino de comer recostó su cabeza en el hombro del albino y se quedó profundamente dormido.

—¡¿Cómo puede dormirse en un lugar público?!

—Mikey tiene la increíble capacidad de dormirse en cualquier lugar después de comer — le explicó Takemichi con una sonrisa que a Naoto le pareció muy tonta.

Un minuto.

Naoto se quedó mirando fijamente al albino, cosa que lo incómodo un poco con el paso de los minutos.

—¿Pasa algo?

—Tú... Nunca te había visto con una sonrisa — explicó consternado. Busco en sus memorias pero sinceramente Naoto jamás recordaba haber visto tan feliz a Takemichi — ¿Tanto te gusta?

Las mejillas del albino se calentaron, intentó buscar una excusa pero para su buena suerte no hizo falta.

—¡¡Mikey!! — un furioso Draken entró al restaurante, ignoró las miradas de los demás comensales y se acercó dando fuertes pisadas a la mesa donde el trío de chicos estaban, una vena pálpito en su cuello al verlo dormido — Hola Naoto, Takemichi — saludó amablemente a los presentes — ¡Bastardo despierta!

—¿E-Eh Kenchin? — Mikey se frotó los ojos y apresó a Takemichi entre sus brazos quién sintió sus mejillas calentarse — Cinco minutos más.

—¡Teniamos que reunirnos con Pah hace como media hora!

Mikey lo ignoro, cerro los ojos volviendo a caer dormido.

El hermano de Izana ||MiTake / TakeMikey||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora