NOVENO CAPITULO

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Luna: ¡Oh, podemos conseguir eso!

Calle: Eso es un pájaro, Luna. (Calle dijo, saltando hacia atrás cuando la lechuza se estrelló contra la jaula) Un pájaro enojado.

Luna: ¿Dónde está Alejo?

Calle: Él tenía que ir a trabajar. Así que solo somos tú y yo para elegir un perrito.

Luna sonrió, paseando por la hilera de jaulas hasta que llegaron a los Perritos. Luna miró algunas jaulas, cayendo de rodillas en una de las jaulas cerca de la parte de atrás.

Luna: Calle, míralo.

Daniela se agachó junto a la niña y miró al perrito, era pequeño, claramente el más pequeño de la camada, tenía pelaje claro con su hocico achatado claramente era un pug.

Luna: Es hermoso. (Luna dijo, mirando a Calle con ojos suplicantes) ¿Podemos adoptarlo, por favor?

Calle: Claro, creo que le gustas. (Daniela sonrió, asintiendo con la cabeza hacia el perrito que estaba presionando su nariz a través de los barrotes) Uh, ¿disculpa? ¿Podemos llevarnos ese?

Chico: ¿Estás segura? Hay perritos más bonitos por aquí. (Dijo el hombre, sacando al cachorro de la jaula y entregándoselo a Luna).

Luna: No, es hermoso. (El hombre asintió con la cabeza)

Chico: Iré a buscar los formularios de adopción.

Luna: Street, mira. Me está lamiendo la mano.

Calle: Le gustas. (Calle sonrió, rascando la cabeza del perrito) ¿Cómo quieres nombrarlo?

Luna: Ramón. Ramonchis de cariño. (Dijo Luna, mirando a Calle con ojos brillantes y emocionados y Calle simplemente no pudo encontrar en sí misma para decir que no al nombre).

Calle: Seguro.

Chico: Aquí tiene, señora. Solo complete estos y podrá irse.

Luna: Mami lo amará. (Luna arrulló, rascando al perrito detrás de la oreja) ¿Qué les paso, por que llegaron aquí, señor?

Chico: Lo encontramos en una casa abandonada, todos los demás perritos estaban en malas condiciones desafortunadamente no lo lograron, pero él es un luchador. Lo logró. (Luna jadeó, abrazando al perrito más cerca de ella y besando su cabeza)

Luna: No te preocupes, Ramón. Yo te cuidaré. Calle, mami y Alejo también. Te amaremos mucho. (Calle le sonrió a Luna mientras continuaba murmurando cosas al perro)

Chico: Niña linda, ¿es tuya?

Luna: No, Calle es la nonoviaaun de mamá.

Chico: ¿Nonoviaaun?

Luna: Sí, Calle no es la novia de mamá todavía, pero puede que muy pronto. (Luna explicó haciendo que el hombre mirara a Calle).

Calle: Es complicado.

Chico: Mm. Ok, estás listo para irte. (El hombre sonrió y Calle asintió, tomando al perrito y al mismo tiempo tomando la mano de la niña mientras se dirigían al auto).

Luna: ¿Puedo llevarlo en la parte de atrás conmigo?

Calle: Está bien, pero tienes que abrazarlo con fuerza, ¿de acuerdo?

Luna asintió con entusiasmo, sonriendo al perrito cuando fue puesto en sus brazos.

Calle: Sabes, tu mamá probablemente te agarraría la nariz si se enterara de que me dijiste lo que dijo.

Luna: ¿Qué parte?

Calle: Que ella dijo que pronto podría ser su novia.

Luna: Oh, no lo hizo. Eso es lo que creo. (Dijo Luna, mientras sus pequeños dedos iban recorriendo el pelaje del perrito dormido).

LA OTRA PUERTA ||  CALLE Y POCHE.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora