El día que no pude detenerte entendí que debías ser libre. El día que ya no estabas aquí entendí que muchas cosas dependían de nosotros, no sólo de mi.
Voltee al cielo buscando una respuesta, pero ni las nubes pudieron explicar si tanto nos amábamos, porque ahora te alejabas.
Te sentía en cada brisa, te veía en cada estrella y en cada rayo de sol. El viento me recordaba el sudor de tu mano y la calidez de tus abrazos, era una sensación que me envolvía el alma.
Si cerraba los ojos, podía escuchar tu respiración lenta o muy rápida y sentía tu corazón latir a la par del mío.
El tiempo se detuvo cuando me rompí, pero aunque cada pedazo cayó conmigo y mi cuerpo sangraba, te amaba.
Te observe desde lejos pensando en si tu me recordarás como yo a ti. Si aún sigues comiendo el mismo sabor de helado ácido o si le guardas cariño a nuestros lugares especiales, esos en donde nos encontramos a nosotros mismos.
La conexión que existía era única, las veces que nuestras energías se unían podía sentirte parte de mi en cada beso y cada vez que tu mano tocaba mi piel.
Hoy que no estas entiendo que la vida te trajo a mi como un regalo prestado y tras tu partida me quedé con un poco de tus vicios para no extrañarte tanto.
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Hasta donde estés.
PoetryPensaba que sabía todo de la vida, no estaba preparada para que el tiempo pasara tan rápido y saltar de un día a otro hacia la madurez. Intentaba ignorar todo lo que pasaba a mi alrededor, pero no siempre pude acertar, aún sigo en este camino intent...
