Capítulo 16

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—En mi defensa, tu fuiste el que me asustó.

El cabello de Jimin tenía algunas gotas en la parte en enfrente, pero claro, eso no era lo que más resaltaba; su playera, blanca en su totalidad, se pegaba a su pecho debido a lo mojada que estaba haciendo que se transparentara. En cuento el omega notó ese detalle se giró de inmediato.

Sin duda ese sería un largo fin de semana.

—¡¿Qué rayos crees que haces?!

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—¡¿Qué rayos crees que haces?!

—Tienes el olor de ese apestoso omega en tu cuello —decía mientras pasaba su nariz desde la línea de la mandíbula hasta el hombro del peliazul.

—Es solo porque se quedó dormido en el autobús y se recargó en mi. Además Beomgyu es mi amigo, en cambio tú te la vives ignorándome —reprochó.

—Los dos somos alfas, lo entiendes, ¿verdad? —aclaró una vez más.

Aquella frase hizo eco, repitiéndose una y otra vez en su mente, como siempre lo hacía.

—Entonces deberías ya alejarte de mi, en lugar de estar viéndome a cada segundo el culo —lo empujó enojado, ya se había cansado del constante rechazo de Jeon aunque ambos sabían que sentían algo el uno por el otro.

Si, ambos eran alfas, pero vamos, estaban en pleno siglo XXI, se veían parejas todo el tiempo por la calle de alfas con alfas, omegas y omegas o alfas y betas, no sería nada nuevo de ver. Pero claro, ¿Qué diría la anticuada familia Jeon sobre aquello? La familia que tenía una creencias de los tiempos de sus tatarabuela no aceptaría que el único desendiente más joven de la familia estuviera con otro alfa, mucho menos cuando Jeon Jungkook había nacido como un alfa pura sangre, único en la familia desde hace trescientos cincuenta años.

Entonces un grito agudo se escuchó por todo el campamento y solo unos pocos fueron capaces de averiguar de quién era.

Yoongi, al escuchar el grito de Beomgyu, sabiendo que estaba con Soobin en un tienda de campaña cerrada y recordando el incidente corrió dejando con las palabras en la boca a Jimin, quien lo regañaba por haberlo empapado. Llegó corriendo con una botella hecha de metal cargada con un litro de agua que no dudaría en tirarle en la cabeza a cualquier alfa que tratara de aprovecharse de su amigo.

Abrió la cremallera de la tienda de campaña a punto de lanzar el gran objeto directo a la cabeza, pero nunca pensó encontrarse con aquello.

—¡Ayuda! —decía en medio de las carcajadas—. So-Soobin, ¡Y-ya déjame! Me haces cosquillas.

Beomgyu estaba tirado boca arriba mientras el de pelo morado picaba sus costillas haciendo que se retorciera y tratara de protegerse, pero era inútil por la risa que le hacía desatar.

—Casi me da un infarto por culpa de ustedes dos —tocó su pecho sintiendo los rápidos latidos de su corazón—. Ya no sabía si preparar una explicación para los padres de Beomgyu o preparar el funeral de Soobin.

—Escucha lo que te estamos diciendo, Jimin —reclamó cuando se dió cuenta de que su amigo no le estaba poniendo atención

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—Escucha lo que te estamos diciendo, Jimin —reclamó cuando se dió cuenta de que su amigo no le estaba poniendo atención.

—Jisoo tiene razón, Park Jimin —Namjoon le dió la razón al pelinegro—. Si sigues así ese chico de allá —señaló a cierto alfa deportista que se empeñaba en su labor de instalar la tienda de campaña con agilidad— te lo robará.

—¡No puedo permitir que pierdas al amor de tu vida, Jimin! —exclamó, metiéndose también a la ronda de consejos que estaban armando para su amigo —Yo, Yoon Jeonghan, juro por mi vida que si no te ayudamos a conquistar a Min Yoongi, los tres seremos perros.

Sus dos amigos lo miraron extrañados y a la vez con expresión de reproche, porque si bien, cuatro cerebros pensaban mejor que uno, sabían que Jimin era fan de negar sus emociones hacia el omega que estaba claro lo traía loco.

—Bueno —se puso de pie una vez colocó la última estaca para que la tienda de campaña tubería mejor estabilidad —. Los escucho.

Lo que habían oído era increíble, un acontecimiento que equivalía al descubrimiento de una nueva especie, en ese momento habría jurado que la comida no les había hecho digestión correctamente porque cabeza dura Jimin había accedido a sus consejos.

—Si te soy honesto nunca pensé llegar tan lejos. Pero este es mi plan, lo que necesitamos es romance para conquistar el corazón de Min. Con un rostro como el tuyo y tu inteligencia seguro que cae a tus pies —explicaba el moreno mientras el rubio lo miraba serio y cruzando los brazos y los otros dos lo miraban como si estuviera dando el discurso de la razón de existir—. Esta noche, mientras los demás están en la parrillada, tu llevarás a Yoongi a algún lugar más tranquilo donde puedan tener privacidad y entonces le dirás: “La luna está hermosa está noche, ¿no crees?” —aquello lo dijo en un tono más suave.

Jeonghan y Jisoo lo alabaron, secando lágrimas imaginarias en sus mejillas, exagerando lo emotivos que estaban por aquellas palabras.

Y Jimin los veía con extrañesa, pero a pesar de ello había decidió probar el supuesto plan, porque cuando vió a Jung Hoseok, resolvió que era un peligro, porque tenía un aspecto increíble, músculos visibles a simple vista y claro, siempre estaba siendo amable y sonriendo, cosa totalmente diferente a Jimin que siempre estaba plantado en ese semblante frío y burlándose dela torpeza del chico que le gustaba. Tal vez no era una actitud que pudiera conquistar.







Wattpad me cambia los guiones largos por cortos!!

Luego veré como arreglo este problema. 

Soltero Profesional - JimsuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora