𝙎𝙖𝙢𝙚 𝙘𝙡𝙤𝙩𝙝𝙚𝙨. [Hanknow] ©

❝5❞

La pelirroja totalmente avergonzada se fue a su asiento dejando a Minho levemente sorprendido por la actitud de Jisung.

— ¿Celosito?. — Preguntó Hyunjin sonriendo.

— ¿Yo sentir celos?, ¿Disculpa?, Yo no siento celos.

— Ajá.

Después de una hora y media sonó la campana y todos salieron a la cafetería y otros se iban a casa.

— ¡Jisung!. — El castaño conocía esa voz y se maldijo por no caminar más rápido.

— ¿Si?. — Dijo sonriendo falsamente.

— Sólo quería hacerte recordar qué hoy iré a tu casa. — Sonrió.

— Ah, si, lo sé, te esperaré.

— Entonces nos vemos ahí. — Minho hizo una reverencia y se fue.

— Qué raro, no me dijo nada sobre lo qué pasó... — Se encogió de hombros y se fue.

Jisung estaba alistandose en su casa, estaba poniéndose un maquillaje leve para remarcar sus lindas facciones, una polera celeste y unos pantalones rasgados negros.

— ¿Me veo bien no?. — Se preguntaba así mismo mirándose en él espejo.

Lo bueno de vivir sólo, era qué podía traer a casa a quién quiera.

Jisung se sentó en su sillón, preparó palomitas y también hizo unas deliciosas galletas, aprovechando qué Minho aún no venía empezó a tomarse fotos.

Y ahí estaba, esperando.

— ¡Ahh qué aburrido!, ¿¡Porque tarda tanto!?. — Chilló Jisung dando leves pataditas en el aire.

Una hora más, Jisung seguía en el sillón esperando, pero no llegó.

5:50, miró su teléfono totalmente agotado, no iba a venir, era obvio.

Jisung hizo un puchero, guardo las palomitas, las galletas, bueno, sólo quedaban cinco galletas y se fue a su cama.

Se quedó dormido rápidamente, pero después abrió los ojos porque le molestaba el sonido qué provenía de su celular.

8:50, ¿Quién llama a esa hora?, ¡A sí!, ¡Él hombre qué lo dejo plantado!.

Jisung agarró él aparato de mala gana y respondió.

— Qué. — Dijo frío.

— Perdón, perdón Jisunggie, es qué ahora, algo ocurrió y yo- — ¡Honnie!, ¡Ya está la película!. — Se escuchó una voz femenina y él sabía perfectamente de quién era.

— Entiendo, adiós. — Jisung colgó y siguió durmiendo sin darse cuenta qué un par de lágrimas rebeldes se escaban de sus ojos.

Al día siguiente, decidió olvidar todo y ignorar a Minho.

Jisung estaba en su casillero sacando unos libros de química, al parecer necesitaba un tutor, sus notas en química son un asco.

— ¿Enserio lo lograste?. — Preguntó una pelinegra.

— ¡Si!, ¡Honnie ayer me ayudó con mi tarea de matemáticas y lo invite a ver una película y me dijo qué si!. — Chilló feliz.

Jisung cerró su casillero fuertemente y se fue directo a la biblioteca, ignorando olímpicamente quién estaba atrás de él a punto de hablarle.

— ¡Jisung- — Hyunjin abrió los ojos en grande y miro al castaño de pies a cabeza.

— ¿Qué?. — Dijo rodando los ojos.

— Hoy no, tú y Minho no traen la misma ropa. — Dijo sorprendido.

— Mejor para mi. — Dijo sentándose.

— Es la primera vez qué no traen la misma ropa... — Susurró confundido, algo anda mal.

— Si vas a hablar de él, entonces vete Hyunjin, hoy tendré mi primera clase con mi tutor, ¿Bien?. — Dijo leyendo su libro.

— Hablamos después. — Dijo llendose.

De pronto alguien le tocó la espalda al castaño, Jisung alzó su cabeza y vio a un chico pálido con gafas.

— Hola, ¿Tú eres Jisung?. — Hablo sonriendo.

— Si, ¿Y tú eres?.

— Tu tutor, Bangchan. — Dijo sentándose a su lado.

— Nunca te vi por aquí. — Dijo dudoso.

— Es qué yo estoy en un grado mayor al tuyo y me postulé para dar tutorías. — Sonrió de nuevo.

— Oh, ya veo, me agrada tu sonrisa, es bonita. — Dijo sonriendo levemente.

— Tu también eres bonito, entonces, ¿Comenzamos te parece?.

— Si.