Perdidos en el tiempo

3.-Despierta

Hola todos. Ha pasado un tiempo, pero necesitaba un pequeño descanso de la escritura y no estoy completamente de buen humor otra vez, pero últimamente quería escribir un poco y lo tomo como una buena señal. Les deseo a todos mucha diversión con este nuevo capítulo.

Despierta

Azula se alegró, cuando se despertó, porque podía sentir que las pesadillas se le escapaban. En sus sueños, estaba obsesionada por su propia imaginación, obsesionada por la aterradora idea de perderse en el tiempo...

Sus ojos se abrieron de par en par y el pánico volvió instantáneamente, formando un extraño nudo dentro de sus entrañas. Azula se arañó en las sábanas y comenzó a escanear la habitación con cuidado. La colocaron en una cama agradable y cómoda dentro de una habitación, que le recordaba algunas antiguas ruinas de los Airtemples que había visto en los antiguos pergaminos, pero esta habitación estaba en las mejores condiciones, recién pintada y amueblada. Azula frunció el ceño más profundo ante la luz de esta habitación. El sol estaba a punto de salir y ya había comenzado a brillar a través de la ventana, pero también una extraña lámpara pasaba una tenue luz en su mesita de noche. La lámpara emitía una luz cálida, como lo haría una llama abierta, pero no ardía ninguna llama, sino que algo brillaba con una luz brillante y caliente dentro de una bombilla de vidrio. El Maestro Fuego miró incrédulo la lámpara. Ella recordaba vagamente, que algún científico de la Nación del Fuego había comenzado a experimentar con los poderes de los rayos y las formas de hacer que este poder se pudiera utilizar para la gloria de la Nación. Algunos experimentos se han relacionado con ideas para crear algunas luces brillantes infinitas...

Un movimiento a su lado sacó a Azula de sus pensamientos. Ella se sobresaltó y se volvió hacia la fuente del movimiento. La cabeza de Kya descansaba a un lado de su cama. La Maestra Agua se había quedado dormida, pero aún sentada en su silla, con la cabeza apoyada en la cama de Azula. Le parecía que la mujer no se había apartado de su lado durante la noche. Esta idea estaba agitando las emociones de Azula. Su instinto le dijo que corriera de inmediato. Cuanto más tiempo se quedara aquí, más debería temer que su tapadera pudiera caer, pero por otro lado...

Empezó a temblar un poco cuando la imagen de la joven volvió a su mente. Podía ver a Korra doblando todos los elementos ante su ojo interno nuevamente. Era imposible, pero ella estaba aquí y debido a la debilidad y los dolores, su cuerpo la dejaba sentir, Azula estaba casi segura de que esto no era un sueño. Todo se sentía demasiado real, incluso su pánico y confusión.

Necesitaba respuestas para algunas preguntas vitales y las necesitaba lo más rápido posible.

"Estás despierto, finalmente".

El corazón de Azula casi dio un vuelco ante la voz, que salió de la esquina de la habitación. Azula se maldijo en su mente por un segundo por ser tan descuidada, porque había extrañado a la mujer en el rincón oscuro de la habitación. Lin se puso de pie y se acercó a la cama. Su expresión era seria y estaba enviando un escalofrío por la espalda de Azula. Había visto ojos como este antes, pero siempre en su padre. No era posible leer la mente de la mujer frente a ella, que vestía este extraño tipo de uniforme, pero sintió que los ojos pensativos se posaban sobre ella de una manera demasiado familiar.

"¿Cómo estás?"

Azula dudó en responder, pero el rostro de Lin no mostró ningún cambio de emoción y esto era mucho más alarmante de lo que hubiera sido cualquier tipo de ira o impaciencia.