Perdidos en el tiempo

5.-Confianza y Atrevimiento

Hola todos. Un nuevo capítulo está listo y les deseo a todos mucha diversión con él.

Confía y Atrévete

Azula estaba bastante agradecida ya que finalmente habían llegado a la habitación de Meelo y se dejó caer en su cama, cansada y exhausta. Reconoció los ojos preocupados del chico posados ​​sobre ella.

"¿Necesitas algo? ¿Agua? ¿Té? ¿O un desayuno?"

Azula estuvo a punto de rechazar esta oferta, pero su estómago gruñendo y gorgoteando aceleró más rápido. Atrajo otra radiante sonrisa a los labios de Meelo.

"Solo quédate aquí, por favor. Volveré pronto con algo para ti, ¿de acuerdo?"

Su cálida sonrisa fue demasiado para resistir y Azula le devolvió la sonrisa y asintió. De repente se encontró por segunda vez en los brazos de Meelo, antes de que el chico saliera corriendo de su habitación.

Azula apoyó la cabeza en la almohada y cerró los ojos. Necesitaba un plan y necesitaba uno rápido. Esta tristeza asfixiante y el shock intentaron regresar, pero por ahora logró mantener su cerebro enfocado. Estaba segura de que ya no estaba en casa y aunque no tenía ni idea de cómo era posible, empezó a creer que estaba en un mal momento. La ciudad, los nuevos Maestros Aire, el templo, el chico... el Avatar. Le parecía que debían haber pasado muchos años desde que había iniciado su fatídico viaje al Reino de la Tierra.

Otro aspecto vino a su mente. Ella tampoco tenía idea de dónde estaba. Sintió lágrimas flotando en sus ojos, pero las secó con un resoplido sarcástico. No importaba dónde estaba ella de todos modos. Todos los lugares que conocía, todos los lugares a los que alguna vez habría regresado también habrían cambiado, así que no importaba dónde estaba ahora. Era más importante obtener una actualización de todo lo que se había perdido. La ayudaría a encontrar un nuevo lugar para esconderse y ayudaría a su Nación a volver a ser gloriosa.

¿O tal vez su Nación ya era gloriosa otra vez?

¿O se ha ido?

¿Y qué ha pasado con Zirin y los demás? ¿Qué ha pasado con Mai, TyLee, Kiyi… Zuko? ¿La han buscado, preocupado por ella… perdida…?

El dolor y la tristeza se apoderaron de nuevo y Azula simplemente hundió la cara en la almohada para amortiguar los sollozos. Oleadas de vergüenza y odio por su propio comportamiento patético se precipitaron sobre ella, pero no fue suficiente para borrar este dolor punzante en su pecho, que exprimía más lágrimas de sus ojos y finalmente cedió a este sentimiento y dejó que sus lágrimas cayeran. libre de nuevo hasta que su propio agotamiento la dejó dormir.

Un suave toque en su hombro la hizo saltar en la cama y encender una llama azul en su palma abierta, pero solo era Meelo, quien estaba de regreso con un rico desayuno, lo suficientemente grande para tres. El chico le dirigió una tímida sonrisa.

"Lo siento, pero el desayuno está listo".

Azula dejó morir la llama y se sentó en su cama en asiento de loto y Meelo hizo lo mismo. La tableta estaba entre ellos y estaba casi llena de comida y bebidas. Huevos, tocino, arroz, fideos, pescado, mariscos, vegetales, pan, bollos, mermelada, miel, frutas, té, agua, jugos… parecía que Meelo había saqueado toda la cocina. El chico ya estaba comiendo huevos y tocino con un poco de arroz y vegetales con audible satisfacción.