Kagami Taiga x Reader "Encuentro"

"Encuentro" | Part 2

Desde aquel entonces han pasado 3 años, faltan 2 meses para graduarte y seguir con tu vida… durante este largo tiempo no has visto al pelirrojo ni tener algún contacto, simplemente no sabias lo que era de él.

Aun recuerdas a la perfección aquel día que lo viste por última vez, su despedida fue lo más duro que has sufrido hasta ahora. Desde entonces todos los días por estos últimos 3 años has visitado el restaurante al que Kagami te invito en ocasiones, creías que si ibas a su lugar favorito entraría por la puerta y se sentaría frente a ti con una sonrisa como en las películas, pero sabias que era imposible, por más que seguías yendo a ese lugar él nunca aparecía, solo llegabas pedias cualquier cosa del menú y te sentabas donde mismo. Lo has estado haciendo durante todo este tiempo sin perder la costumbre. Sin embargo, esa persona a la que tanto esperabas… nunca llegó. 

Al día siguiente de su despedida llegaste al gimnasio con la esperanza de que todo fuera una broma y poder verlo jugar de nuevo, era lo que más deseabas desde entonces… observar al pelirrojo sostener un balón y que corriera por toda la cancha con total alegría con esa sonrisa suya al encestar.

Cada vez que entrabas al gimnasio comenzabas a llorar en silencio, preferiste salir de ahí antes de que todos los recuerdos te afectaran, aunque era un poco tarde para eso.

El chico de ojos azul claro se dio cuenta de esto, también sabia por lo que pasabas ya que su mejor amigo se había ido para nunca más volver a verlo.

¿Por qué te alejaste? Era una de las preguntas que nunca tenían respuesta.

Varias veces llegabas a casa, abrías tu celular con la mínima esperanza de que apareciera algún mensaje por parte de Kagami que dijera “Regresaré a casa”

Lagrimas caían de tus ojos una tras otra, corriendo por tu mejilla, siendo incapaz de controlar el dolor que decía “El jamás volverá”

Es en ese momento cuando te das cuenta de que todo se vino abajo en el instante de su partida, su amabilidad la cual te hacía sentir segura se fue junto a él. No te dejó oportunidad de decirle “Estaré esperándote”. Aun así pasen 10…20… 30 años, tu seguirías aguardando por su regreso y tenerlo de nuevo entre tus brazos.

Cada día vivías con el miedo de que se apareciera frente a ti y dijera “Estoy con otra persona” nunca fuiste capaz de superarlo ahora todo se ha vuelto una simple fantasía.

Todo se acabó, el sonido del viento se llevó consigo esas dulces palabras que tanto amabas escuchar, el sentimiento de felicidad al estar a su lado, esa gentileza que te hacía sentir segura, el toque de su mano al unirla con la tuya, te hacia feliz pero al final esos recuerdos ya no servirán de nada si él no es quien está contigo.   

Hay veces en las que todavía buscas por una manera para escapar de este mundo donde el no está. Cuando la noche se vuelve fría lo necesitas, el es la única persona que puede calmarte. “Quiero verte” Susurrabas. Nadie podría ocupar el lugar de aquel chico.

Cada mañana donde no podías decidir si seguir pensando en el o solo olvidarlo siempre llagaba la esperanza que decía “El no te ha olvidado”

Hay una razón para seguir esperando, pero para ser honesta contigo misma no sabias si serias capaz de soportarlo “Aun no te rindas” decía algo en tu interior. 

Puedes hacerlo, confía en ti misma, cierto motivo seguía insistiendo para no dejarte caer. Aunque se sienta como si lo hubieras perdido prometiste esperarlo no importa el tiempo que fuese, esperabas por verlo sonreír de nuevo

Necesitabas saber que él está bien, incluso si tú no eres la persona que está a su lado. Solo un par de minutos bastaban para confirmar que aun lo seguías extrañando.