El marido del amante de mi marido

capítulo 21 - Yo... que... maldición... te amo.

Martín: Alicia eres muy hermosa y caliente, por eso cuando salimos me muero de celos, todos te miran, atraes miradas, parece que tienes algo que quieren.

Alicia: Tonterías.

Martín: De verdad.

Creo que te mira toda recatada, toda pose de ama de casa y piensan "esta es para matrimonio, la quiero".- Martín puso los ojos en blanco. -  Hasta Rodrigo admitió eso, dijo que eras mujer para casarte y que te querías llevar con tus hijos, esa hija de... - Le tapé la boca. - Mi deseo era pegarle un puñetazo, un buen padre.

Alicia: Tan celoso. - Lo abrazo fuerte, era lo mejor del mundo estar así con él. - No nos estropeemos la noche pensando en Rodrigo.

Martín: Cierto. - Me da un beso. - Nuestra noche maravillosa. - Bésame otra vez. - ¿Tengo que volver al sofá?

Alicia: Sabes que tenemos que mantener las apariencias. - Me sentí tan culpable.

Martín: Está bien. - Iba a levantarse de la cama.

Alicia: Ya sé qué hacer.

Tomé mi teléfono celular y lo configuré para despertarme a las cinco y media de la mañana para que nadie se despertara. - cuando el celular se despierta, vas a la sala.

Martín: Unas horas más durmiendo con mi novia, me encanta.

Alicia: Con la tuya, ¿qué? - pregunto sorprendida

Martin:¡Mi novia!

Alicia: ¿Desde cuando?

Martin: Desde siempre.-  Me reí por la forma en que lo dijo, Martin se tiró a un lado pero siguió abrazándome. - Alicia, ahora eres mi novia, ahora tendrás que aguantarme.

Alicia: ¿A menudo empiezas a tener relaciones con personas sin que ellas lo sepan?

Martin: No, solo contigo.- Me dio un beso. - No quiero tener presiones, pero quiero algo serio contigo.

Alicia: Martín tu conoces mi situación, soy casada.

Martin:No por mucho tiempo.

Alicia: Realmente no sé qué pasará en el futuro si vuelve Sérgio.

Martín: ¿Cómo así? ¿Si vuelve Sergio? ¿Tienes intención de tener algo con él todavía?

Alicia: Martín no es así, es mi marido.

Martin: Hay más ¿y qué? Está con otra persona, eso es suficiente para que no quieras tener nada más con él. ¿Crees que se acuesta con muchas mujeres y que podría tener una enfermedad? Alicia no puede creer que seas increíble.

Alicia: Sabes que estoy casada desde el principio, incluso tu esposa fue una de las amantes de mi esposo, las cosas entre Sérgio y yo están sin resolver...

Martín: Lo entiendo todo. - Martín se levantó de la cama.
Alicia: Martín, vuelve a la cama.

Martín: No, dormiré en la sala. No quiero ponerme en los zapatos de tu precioso esposo.

Alicia: ¿De verdad vas a hacer esto? - Me puse las bragas y la camiseta. - Martín. -  Tomé su mano antes de que se fuera. - Cariño, las cosas estaban bien hasta hace cinco minutos y ahora estamos peleando.

Martín: Sergio siempre estará con nosotros.

Alicia:Tomaste esta posición de amante, no solo me culpes.

Martín: Alicia, estoy cansado de ser solo un amante, quiero más Alicia, por primera vez en mi vida, quiero algo más con alguien, he estado pensando en cosas tontas como tener hijos, casarme y tener una casa para pasar los fines de semana viendo películas o jugando juegos tontos porque sé que te gusta eso. Quiero algo contigo, algo real, algo que pueda decirle a la gente y decirte lo hermosa, inteligente y cariñosa que eres. - Me sentí mal, no podía hacer eso por Martín, ya tenía dos hijos, no pensaba en más. ¿Casarse? ¡Ya estoy casada! -  Entonces todo dentro de mí entró en conflicto, porque quería quedarme con Martín, pero no podía darle todo lo que necesita. - No estás dispuesta a hacer eso, ¿verdad? Siempre seré el amante, el que puede ir a tu casa cuando Sérgio no está y con quien pasas los miércoles y regresas antes de las cinco por tus hijos, siempre seré el amante, la segunda opción. - Vi una lágrima solitaria caer sobre su mejilla.

Martín: Lo sé... Pero eso no hace que me duela menos Alicia... Yo... que... maldición... te amo. - Mi mundo se derrumbó en ese momento, no estaba preparado para escuchar esas palabras, más aún en la forma profunda en que fueron dichas. ¿Martin me amaba y yo también lo amaba? Esta pregunta que rondaba por mi cabeza.

No puedo responder porque sería mentira, dijo que entendía pero aún así ella dormía en la sala, no era la forma en que quería recordar mi primera vez con ella pero sucedió. Cuando despertamos mis hijos decidieron ir a la playa y me dejaron en casa con Martín enojado porque me estaba ignorando, tendría que revertir esta situación.

Alicia: ¿Cuánto tiempo vas a estar sin palabras conmigo? - Lo abracé por detrás mientras lavaba los platos, besé su hombro y luego su cuello, vi su piel de gallina. - Martín.. amor, amor... - Siguieron besándolo pero él no dijo nada. - ¿Te perderás la oportunidad de disfrutar el fin de semana?

Martín: Yo no soy Sérgio, no vas a solucionar todo con sexo. -  Se alejó de mí y se secó las manos. alicia: claro que no - Me acerqué de nuevo. - Solo quiero estar contigo, esto no tiene nada que ver con el sexo.

Alicia: claro que no - Me acerqué de nuevo. - Solo quiero estar contigo, esto no tiene nada que ver con el sexo.

Martín: ¿Entonces no quieres tener sexo conmigo?

Alicia: Estás tratando de encontrar otra razón para que volvamos a pelear conmigo cuando yo solo quiero estar contigo. - Dejó escapar un suspiro.

Martín: Estoy molesto Alicia, me gustas mucho y me siento inseguro.

Alicia: Una vez me dijiste que me preocupaba demasiado, créeme un poco.

Martín: Confío...

Alicia: ¿No confías en Sérgio?

Martín: No, no es eso... tengo miedo, ¿me prometes algo? - Estuve de acuerdo. - Si algún día vas a tomar una decisión sobre tu matrimonio...

Alicia: Te prometo que pensaré en mí. - Sonrió en la esquina, tiré de él para besarme, me faltaba su boca.Martin respondió en ese momento y todo entre nosotros pareció volver a la normalidad.