Seguro te pierdo [Mitsukkai]

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El tiempo es relativo y no objeto sobre ello, porque la semana transcurrió rápidamente, tanto así que ya es lunes por la mañana. Mi humor es demasiado bueno para ser inicio de semana, teniendo en cuenta las clases, las tareas y demás cosas que añadir, pero estoy impaciente por verte hoy. No logré conciliar el sueño ayer por la noche, aún así me veo fresco y lleno de vida. Lamentablemente en medio de la primer clase el tiempo decidió jugar en mi contra y pasa en exceso lento.

Miro a la ventana, veo la brisa sacudir los árboles, algunas nubes moverse, todo demasiado aburrido. La voz del profesor es solo parte de ruido de fondo, en otra ocasión podría estar atento a lo que habla, no interesado, solo le prestaría suficiente atención para no perderme en los ejercicios, la excepción es exclusiva del día, porque estoy perdido en mi mente. Puedo mirar el reloj en la pared y no se ha movido más que para marcar dos minutos de diferencia desde que decidí ignorar todo mi alrededor, lo que indica que será eterna la espera por escuchar el sonido de la campana de salida.

Mi energía radiante volvió cuando estuve fuera del edificio y me dirigía hacía ti. Dentro de mi burbuja color rosa mientras subía escalón por escalón a encontrarte, no supe bien cuanto me tomó llegar pero eso era lo menos importante ahora. Toqué la puerta para ingresar al taller y me recibiste tú solamente, hoy no habría nadie más porque los días de actividades eran martes y jueves.

- Adelante, Hakkai, te estaba esperando - Esto era más común de lo que alguien podría pensar, vernos a solas en el taller o tu casa, pero todo en un trato meramente amistoso.

- Gracias, Taka-chan - Por inercia me dirijo a mi lugar de siempre, me acomodo y espero paciente a que hables.

- Vendrán los chicos en un rato. Tomaré sus medidas, las que tengo son de hace meses y quiero que sean exactas, ¿Te parece si empezamos? - Extiendes la cinta con ambas manos y un escalofrío recorre mi espalda, una sensación rara.

- Lo que órdenes - Sonó más como suspiro que como palabras, pero no sé bien porque.

En medio del salón, me encuentro con los brazos abiertos mientras de mueves rodeándome. Lo has hecho antes, pero un escozor en mi piel se presenta esta vez. El silencio es invasivo, pero eso me ayuda a concentrarme en tus movimientos ágiles a mi alrededor. Mis instintos están algo encendidos, quizá estás un poco más cerca. Estás terminando y dejaste la peor parte para al final, envolver mi torso y abdomen, tal vez la cinta está un poco más ajustada, o tu aliento está muy cerca de mi cuerpo. Murmuras las cifras en voz baja. Siento calor.

- ¿Eh?, ¿Quieres que abra la ventana? - Enfrentas mi mirada que estaba clavada apenas hace segundos en tus cabellos. Sin darte una respuesta a lo que has dicho porque no estoy dejando de pensar en voz alta.

- Luces muy bien con las gafas - La densidad del aire en el ambiente podría fácilmente ahogar a alguien, como a nosotros en este momento. Nadie habla. Un sonrojo leve pero perceptible está en tus mejillas y yo, yo quiero que me tragué la tierra.

- ¡Mitsuya! - Extrañamente estoy frustrado y no aliviado de que interrumpan esto, a pesar de que no estábamos yendo a ningún lado.

- ¿Por qué no se mueven? - Sí, tanto Baji como Kazutora deberían ser acreedores al premió de los más insoportables.

- Fue el susto de que entrarán de la nada estábamos concentrados en otra cosa - Envidio a Taka-chan porque sus sonrojos vienen y van como viento en la cara.

- Tiene sentido, trajimos algunas cosas para comer, así que no hay prisa, ¿Verdad Kazutora?- Eso solo significa una cosa, no se irán.

-Claro mi buen amigo, además Fuyu vendrá para alcanzarnos - Más tontos, lo que necesitaba.

Creer que tendría un buen día fue soñar en grande, pero todavía tengo esperanza que puede mejorar mañana, me ocuparé de observarte mientras tanto.

~Crisantemo 🦋