Novio de Alquiler (En edición)

Expresión de estreñida

Capitulo 2 

Los próximos días fueron subiendo en escala de malo a peor con los preparativos de la boda. Sara era como una bomba de tiempo que explotaba cada hora. Hoy sería el último ensayo de boda. Desde temprano en la mañana ha habido personas corriendo de un lado a otro, moviendo y acomodando cosas. Cuando me decido salir de mi cueva ya lista para el ensayo y entrometerme un poco en el bullicio me arrepiento por un momento cuando casi soy atropellada, el trabajador pide disculpas sin siquiera mirarme. Una vez bajo las escaleras de caracol mi casa esta irreconocible. Salgo hacia el patio trasero donde se celebrará la boda el día de mañana y parece una escena salida de un cuento de hadas. Flores flotan por la piscina acorde con la decoración, luces chinas están colgando de los arboles… todo es increíble. Sara tenía razón, al final todo siempre vale la pena.

—Hasta que al fin te dignas en bajar. Ve y toma tu lugar, solo faltas tú. —Al principio pensaba que mi madre hablaba con alguien por teléfono hasta que me dio unos fuertes empujones.

—Ya voy mamá. — Pero ella había volado lejos de mí.

Me senté en el asiento donde frente en un papel decía mi nombre. Tyron está a mi izquierda y Sara a su lado con una sonrisa imborrable. La silla al lado de Sara se encuentra vacía, me estiro un poco para tratar de ver el nombre pero está un poco inclinado hacia el otro lado impidiéndome verlo. De seguro es el padrino, ¿Sera lindo? ¿Lo habré conocido antes? Salgo de mis cavilaciones cuando veo entrar a la familia de Damien, ¿Por qué nuestras familias debían conocerse? No tenían la misma relación amistosa de antes luego de nuestra ruptura. Lucho con todos los impulsos de no buscar a Damien, pero se me hace imposible no hacerlo y cuando no lo veo un sentimiento de decepción me inunda.

—Pedimos su atención. — Vuelvo mi vista hacia Tyron que está chocando un cubierto contra la copa pero todos siguen en su alto parloteo. Vuelve a darle unos toques a la copa y a pedir la atención de los presentes.

— ¡Se pueden callar, por favor! — grito luego de la mirada de auxilio de Sara, el padrino llegó y lo escucho su irreconocible risa ronca. Siempre esta Claire la alborotosa para arreglar todo. — Gracias.

—Ahora sí. — Tyron me sonríe. — Gracias, Claire.

Dieron paso al protocolo de lo que todos haríamos mañana, una vez eso terminaron dieron paso a los vals. Primero iría el primer baile de los novios, luego iríamos cambiando de parejas hasta integrarnos todos. Luego de Sara y Tyron, papa sustituyó a Tyron y mama a Sara.

—Es mi turno. — Gruño para mí en voz baja. — Bailo con Tyron mientras Sara baila con el padrino. Cambia el ritmo de la música y es momento de que ahora baile con el padrino pero no lo encuentro en ningún lado porque ni siquiera recuerdo su cara.

Cuando estoy por darme por vencida siento un jalón en mi brazo, era el chico que se había sentado junto a Sara, el padrino. Coloca mi mano izquierda en su hombro como si yo no supiera hacerlo, mientras agarra mi mano derecha duramente.

—Soy James.

—James, me estas lastimando, ¿Eres un animal? — Sonríe de lado y mira hacia otro lado.