MIS OMEGAS

parte sin título

Leer la nota final.

Cuando Feilong y Akihito salieron del despacho de su esposo inmediatamente se encontraron a Rayden y Mayu, sus dos hijos, que al ver la cara de enfado que llevaba Akihito de inmediato se acercaron a preguntar que pasaba.

- Mami - Dijo el joven alfa-  sucede algo?

- Ven Rayden, tenemos que hablar de tu padre- Dijo Akihito para después, jalar a su hijo y llevarlo a su habitación, dejando a los dos omegas atrás.

- Que sucede mami?- pregunto con preocupación la pequeña omega a Fei.

- Nada malo cariño, cuando lleguen tus hermanos, vengan los tres a mi habitación, ¿de acuerdo?- la pequeña asintió  no muy convencida.

Aproximadamente cuarenta minutos después sus dos hijos omegas entraron y unos minutos después entro su hijo alfa.

- Ya estamos aquí los tres mami- dijo la pequeña omega- de que querías hablarnos?- Feilong no contesto de inmediato, pues aunque para el era algo bastante facil, le era muy difícil decirles a sus hijos.

- Es sobre el amante de papá?- dejo el otro omega.

- Yahiko, no es el amante de tu padre, es la pareja de tu padre y si, si es sobre el- dijo para después hacer una pausa- El vendrá a vivir con nosotros.

Sus hijos tenían expresiones serías, a diferencia de  su hijo mayor  que su rostro no mostraba ninguna reacción. La daba cierta gracia que su hijo mayor no solo se aparecía a Ryuichi en apariencia, sino también en sus gestos.

- Por que?- Pregunto el gemelo omega.

- Porque es lo correcto, Misaki-kun es omega de tu padre, y lo correcto es que un omega viva con su alfa.

- Akihito-san - comenzó el alfa- dijo que ese omega nos quitara a nuestro padre.

- Eso no es verdad Ryu, y tú lo sabes muy bien, cuando Rayden nació el amor de su padre por ustedes no cambio entonces y tampoco lo hará ahora- sus hijos no dijeron nada solo escuchaban en silencio- no les pido que lo quiera... Simplemente que lo respeten ¿Lo harán?

- Tu estarás bien?- pregunto el joven omega.

- Claro que estaré bien, esto es solo un cambio en nuestras vidas.

- Está bien- dijo el alfa- mientras que ese omega no haga nada que los dañe a ustedes, supongo que no habrá problema.

- Misaki-kun es una buena persona, y estoy seguro que les va a caer bien.

Sus tres cachorros no muy convencidos aceptaron llevar la fiesta en paz, y eso lo tranquilizaba.

En estos momentos se encontraba tomando una ducha para desestresarse, tenía tantas cosas un su mente, que le costaba un poco ordenarlos, a pesar de que había renunciado al puesto de líder Yakuza, seguía en contacto con su hermano.

Le era sorprendente como a cambiado su mentalidad, en su adolescencia, si su pareja hubiese siquiera mirado a otro omega lo hubiera mandado a matar, pero ahora aquí estaba, aceptando a otro omega de su esposo.

Salió de sus pensamientos cuando un fuerte brazo sujeto su cintura y una mano traviesa comenzó a jugar entre medio de sus glúteos, muy cercas de su entrada.

- Eres un pervertido- le dijo a su esposo.

- Tu me provocas cariño- contesto Asami empezando a introducir su dedo en la estrecha entrada.

- Entonces has bien tu trabajo- le contesto a modo de reto.

Poco a poco el calor subía entre sus cuerpos, ni siquiera el agua de la ducha que caía sobre ellos podía apagarlo.