cuando jungwon se levantó primero, sus piernas temblaban y en toda la extensión de su cadera también. adhirió un puchero en sus labios, quejumbroso, al enderezar su espalda, las sábanas escurridas en todo su cuerpo, lo cual se hizo extraño porque él es de patalear en la noche y arrebatarse cualquier cosa que estaba en su encima por el calor. pero entonces se le dio la idea de que jongseong haya estado atento a cubrirlo durante toda la hora nocturna.
sonrió a duras penas y después hizo una mueca, por el constante dolor. con un leve jadeo jungwon deladeó su rostro, chocando con el tranquilo del alfa. estaba adormilado, algunas hebras rubias sobresaliendo, sus labios de por sí rojizos también estaban entre abiertos. los colores inundaron su rostro al recordar las tres veces que jongseong enudó en él y lo envolvió en su aroma. su celo fue un poco fuerte y había de estar cansado por ello, tal vez lo habría dejado terminar su siesta, si no hubiera sido por el incesante ardor en su cuello que ahora mismo lo aturdía, obligándolo llevar sus manos a su, al parecer, marca reciente.
oh, espera.
¿una marca? ¿qué?
jungwon abrió sus ojos, alarmado.
ㅡgigi ㅡinmediatamente sus manos buscaron al alfa, y al encontrarlo lo sacudioㅡ gigi, gigi, despiértate ya.
dios, pero ¿cuándo pasó? ellos solo...
ㅡuhm ㅡgruñó como única repuesta jongseong, arrebujando más su cuerpo con las sábanasㅡ no estoy... me fui de viaje a estados unidos.
el omega castaño bufó, cruzándose de brazos, él no estaba para juegos. claro, jongseong no era quien sostenía la dolorosa marca, y no iba a ser regañado por sus padres. jongseong no será el que deba dolerle la cadera, jongseong no hará nada más que solo dormir. ¡en fin, alfas!
ㅡa veces me caes mal ㅡmurmuró luego de un silencio, enfurruñadoㅡ alfa tonto.
jongseong por alguna razón quería prestarle atención a su pequeño omego gatito pero realmente se hallaba agotado. había estado cuidando de jungwon toda la noche antes de preferir dormir como normalmente otros lo hacían ni bien terminan su sesión calurosa. pero no, como siempre aquel estúpido lado que insistía en mantener al omega cómodo o a salvo le ganaba.
ㅡcinco minutos ㅡbalbucea, sus labios abultados no permitiéndole ser claroㅡ no, seis...
ㅡ¡me marcaste, gigi! ㅡle reprochó jungwon a susurro, haciendo otro mohín al vislumbrar al alfa acomodarse más la almohada en un silencio sepulcral, ignorándolo.
ㅡhmm bueno, para la próxima te la marco más ㅡse giró para por fin caer en los brazos de morfeo, sereno.
sin embargo volteó su cuerpo asustado al escucharlo con exactitud, despertando todo su ser en el camino.
ㅡ¿q-qué? ㅡtartamudeó jongseong, sorprendido y pasmadoㅡ ¿quién? ¿yo? ¿qué? ¿te marqué?
le cuestiona y el omega asiente, con los brazos cruzados y reproche en su mirada.
ㅡmadre santa no tan santa...
🎧
jongseong había creído que la única mirada de omega que temería iba a ser de su madre, o en otros casos peores, jungwon.
pero estaba muy equivocado.
una vez su novio le había dicho que su familia se caracteriza por poseer una mirada asesina y filosa. una que llegaba a amedrentar pese a tu jerarquía social, que incluso ibas a tener una pesadilla que te iba a agitar el corazón de la peor manera posible. y vaya que jungwon no había mentido porque los ojos avellanas que alguna vez fueron tiernos para él, le estaban prácticamente doblegando.
era yang jungwoo quién lo observaba cruelmente.
el rubio había llegado en la tarde con el omega en su encima abrazado a su cuello porque según le dolían demasiado las piernas como para caminar, obviamente jongseong le creyó y lo cargó hasta su hogar con la esperanza de no encontrarse con nadie, la cual desechó ni bien vislumbró al omega expulsando humo por los oídos.
tragó saliva.
ㅡperdón... ㅡle dijo el alfa al no poder soportar más, atrayendo la atención de ambos hermanosㅡ tú mirada me esta asustando.
jungwoo lo miró, arqueando la ceja y marcando más su ceño.
ㅡ¿y qué quieres que haga, park? ㅡescupió el omega, su voz duraㅡ ¿debería felicitarte por marcar a mi hermano? oh bueno, si es así espera a que me ponga el disfraz de kumamon que tengo en el closet y te hago un baile en plena fiesta que voy a armarte.
jongseong se quedó un instante pensativo en el por qué rayos el hermano de su omega tenía un disfraz del oso panda negro. negó la cabeza, de seguro se trata de yukhei y sus fetiches demasiado excéntricos.
por otro lado, jungwon ya se había bajado de la espalda de jongseong para ir a la cocina a sacar un vaso de yogurt de fresa, presenciando sin falta la charla de ambos, y correr hacia el sofá a ver el drama que jungwoo dejó reproduciendo en la pantalla.
ㅡlo peor de todo es que me echarán la culpa a mí ㅡprosiguió el omega mayorㅡ yo te ayudé con jungwon a escondidas de mingyu, dios, me va a matar.
llevó sus manos en el rostro, tirando un teatral grito de exasperación tan fuerte que llegó hasta asustar al pequeño castaño, haciendo que derrame un poco del líquido en su ropa.
jongseong se sintió un poco mal por la confesión, claro, dudaba mucho ante el hecho que el hermano mayor y alfa de la familia yang se halle dispuesto a dejar ir a uno de los menores a pasar el celo con su alfa.
tener relaciones está bien, pero marcar al omega... bueno, tampoco era como si jongseong pudo haberlo evitado sus instintos de alfa, no estuvo consciente de la ideología de los yang y que marcar a alguien aún menor de edad no sea correcto. y del bajo perfil que conllevaban a esos temas, la reservación, no jugaban muy a su favor, no sabía que podían opinar los señores yang respecto a eso.
ㅡse suponía que jungwon debía correr su cuello para que no pasará esto ㅡalegó luego el omega.
el castaño luego de limpiar el poco rastro de líquido en su ropa giró su rostro, enojado.
ㅡ¡pues gracias por decírmelo ahora! ㅡchilló, ya harto de la discusión.
ㅡ¡te lo dije mientras empacaba tus cosas!
ㅡ¡no, no lo hiciste!
ㅡ¡sí lo hice!
ㅡ¡no!
ㅡ¡sí!
jongseong no sabía qué hacer.
ㅡ¡no, no, no!
ㅡ¡sí, sí, sí!
ㅡ¡no, tonto! ㅡpegó un grito, yendo donde estaba jongseong y así poder colocarse a su lado para jalonearlo de la mangaㅡ gigi, dile que no me dijo nada.
y otra vez le hizo esa miradita de gatito regañado, endulzando su corazón.
el alfa iba a decir algo al respecto, pero la puerta siendo tocada se interpuso en sus palabras a la vez que una voz potente de alfa se colaba en sus oídos.
ㅡ¡jungwoo olvidé las llaves del auto, ábreme la puerta que debo ir a recoger a mamá del aeropuerto!
era mingyu.
jongseong estaba agradeciendo que llorar sea gratis.
