CLOVER LOVE (Yuno x Oc) - Black Clover

Clover Love 010

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Zohar

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— ¿Segura que estas bien?

— Ya te dije que si Yuno, la magia curativa de Mimosa es más eficaz que la mía, estoy bien — aseguró Shamyra, Yuno no dejaba de preguntarle por su estado y se negaba a alejarse mucho de ella

Después de derrotar al caballero del Diamante, atarlo y quitarle su grimorio, los caballeros del Reino del Trébol hicieron su ingreso a la cámara del tesoro de la mazmorra. 

Dentro se toparon con monedas de oro, objetos valiosos, telas hermosas e infinidad de riquezas. Curiosos, todos se pusieron a observar los alrededores, al menos hasta que Klaus los regaño por la posibilidad de encontrar objetos de interés nacional. Shamyra reía al presenciar la pequeña discusión entre su superior y el pequeño Toro Negro hasta que sintió un fino aleteo, miró para sus lados pero no encontró nada, pensó que solo era su imaginación pero volvió a sentirlo, el mismo aleteo, giró el rostro y ahí estaba, una pequeña mariposa blanca volando a su alrededor. 

El ser alado se posó en su nariz y luego volvió a elevarse dirigiéndose a una pared alejada del resto. La princesa miró a los demás pero nadie se había percatado de su situación, talvez no debía seguirla, pero lo hizo. Caminó hasta estar frente a la pared, donde la mariposa se posó en un ladrillo en específico, este estaba cubierto de polvo, Shamyra lo limpió dejando ver un emblema de una media luna, parecía que el ladrillo sobresalía de la pared así que lo presionó. La pared se abrió y ella entró sin dudarlo y al momento una luz blanca la cegó.

Shamyra cerró los ojos y al volver a abrirlos ya no estaba con sus compañeros, todo estaba en blanco, caminó sin rumbo por un largo tiempo hasta llegar a un hermoso árbol de hojas blancas y debajo de él recostado había un dragón plateado de mediano tamaño, se veía hermoso con esas escamas brillando.

"Que hermoso" Fue lo primero que pensó

— Te he esperado por años — el ser abrió los ojos mirando a la chica, ella se sorprendió — Princesa Shamyra

— ¿Cómo sabes mi nombre? ¿Quién eres? Pensé que los dragones se habían extinguido hace cientos de años — preguntó un poco alarmada. No era nada común ver un dragón con vida y mucho menos que este te hablará con tanta familiaridad

— Eso no es importante ahora — le respondió acercándose a ella a lo que la albina retrocedió — no tengas miedo, yo estoy aquí para cuidar de ti. Y veo que lo hice justo a tiempo, tienes miedo, miedo de tu propio poder

Shamyra se puso rígida, era verdad, ¿Pero cómo lo sabía él? Nadie en el reino del Treból sabía eso, solo su padre y Erika...

— Muchos desean tener una gran cantidad de maná, pero yo no — comenzó a hablar decaída — me gustaría...poder volver a mi estado de hace un año, no sobresalía, mis niveles eran los mismos que cualquier otro miembro de la realeza

— No sigas repeliéndolos, son parte de ti — el dragón levantó una de sus patas y con una de sus garras tocó la frente de la chica, donde un tenue brillo se hizo presente — de pequeña confiabas plenamente en tus habilidades, y tus amigos también lo hacían ¿No lo recuerdas?

La princesa empezó a ver detrás del reptil como se formaba una especie de espejo blanco y comenzaba a reflejar algunas imágenes, allí estaban Erika, Yuno y Asta de niños, recordaba aquella situación.