Traitor

02

¿Cómo empezó nuestra pequeña historia de amor?

Bueno, apenas estaba iniciando el año y yo ya logre hacerme amiga de media clase (Sí, soy muy sociable aunque no lo intente). Era un día de clases común y corriente como cualquier otro hasta cierto punto.

Teníamos solo 14 cuando charlamos por primera vez...

—¡Hey, hey! ¿¡A quién le dices sucia hija de perra!? —Exclamó con furia, a pesar de que por dentro la risa me carcoma al ser nada más que un broma entre compañeros.

—Coño Luz, no te descuides; siento que Blight es de esas que te muele a golpes cuando se enoja. —Susurra Hunter en broma hacia la chica que estoy tratando de intimidar, a pesar de que sea un poco más baja que ella.

Sin embargo, aquella morena que ignore por lo que va del año escolar me alza una pequeña flor del patio de la escuela.

—Toma, Amity; para ti para que no te enojes conmigo.

Una tierna y dulce sonrisa crece en sus labios, haciéndome callar con sorpresa. A pesar de ser nada más que una broma absolutamente nadie me había dado algo tan tierno.

—Bien, acepto la flor. Perdonada. ¡Pero ten cuidado para la próxima vez!

—Luz, ten cuidado, le estás quitando la novia al Hunter. —Gus menciona en un susurro, a lo cual, Hunter enrojece en furia.

—¡Que solo somos amigos mierda! —Refunfuña con molestia.

—No te enojes mija —Luz ignora por completo la pelea de Gus y Hunter y concentra su atención en mi—. Bueno... si me aceptaste la rosa podrías también aceptar...

Se levanta de su puesto y hace una pose realmente dramática.

—¿MI AMOR POR TI?

No puedo evitar las risas que salen de mi garganta con volumen, tanto que me retuerso en mi puesto, ella también se retuerce y rie junto con el resto del grupo.

Amo a mi clase, porque son tan escandalosos como yo y no son tan prejuiciosos como los de mi antigua escuela.

—Ay basta. Me sonrojo. —Le sigo el juego, insinuando ser una dama siendo seducida por un caballero de armadura dorada. Que patético pero al mismo tiempo divertido.

—La verdad si harían gran pareja los dos —Menciona Hunter—, están igual de pendejos.

Sin más me echo de nuevo a reír de mi misma.

Y sin saberlo, aquella pequeña broma nos daría un pequeño empujón a interactuar un poco más.

—¿Estas segura? —Pregunto nuevamente, apretando una pila de hojas contra mi pecho; lo que está escrito en ellas es mi mayor tesoro—, dudo mucho que esta clase de cosas te guste.

—No me importa. Termina de quitarme el resto de la inocencia que me queda.

Hace un tiempo mencione que escribía pequeñas novelas, e interesada, Luz me pidió una escena de ellas para verificar que tan "traumante" era, ya que, básicamente, era porno lesbico, pero narrado.

—Bien —Digo y le entrego mi escrito foto copiado—, pero después no digas que no te lo advertí.

No se cuando paso el tiempo, pero de repente, nuestras conversaciones largas por teléfono duraron hasta la madruga, y no eran unas normales, sino que nos llegamos a abrir de una manera tan íntima como nunca lo había hecho con alguien, lo mejor de todo es que no me juzgo por lo que escribía, al contrario; le encantó cada página y letra y talento con la escritura.

Ahí fue cuando sentí un flechazo en mi pequeño corazón.

Dos años después, ambas estábamos de nuevo aquí, detrás de uno de los muros de la escuela muy lejos de todos mientras que, prácticamente, nos comíamos a besos hambrientos.

Sabía desde un principio ella era una adolescente hormonal que le encantaba el sexo, y obvio, yo era igual, así que esta clase de combinaciones era simplemente peligrosas en varios niveles. Mientras no éramos pareja siempre espere a que ella me arrastrará hacia un lugar aislado de lo estudiantes y me comiera a besos como ahora, pero lamentablemente yo fui quien tomó la iniciativa de dar nuestro primer beso sensual, de ahí me pidió ser su novia de la mejor manera a pesar de que no hubieron flores ni chocolates; eso para mi era totalmente innecesario si ella tenía un gran corazón y unos exquisitos labios increíbles para besar, eso es suficiente para mi para una propuesta de noviazgo.

La sesión de besos sigue mientras yo envuelvo mis brazos alrededor de su cuello y Luz toma mi cintura. Gracias a la diferencia de altura tengo que ponerme en puntillas para alcanzarla, pero eso no la detiene a dejar que la pasión fluya no solo entre nuestros labios, sino que está vez se atreve a tratar de tomar mi trasero con su mano, pero la detengo por los nervios.

—Vamos Ams, muero por ti y quiero dar el siguiente paso... —Ella jadea, suplicando.

—Bebé, es solo que... —Mi cuerpo se retuerce al sentir un apretó de su firme mano en mi trasero, no me quejo, sin embargo, estamos en una escuela, y si nos descubren será fatal para nosotras—... Uno... estamos en una escuela. Y-Y dos... —Logro apartarla lo suficiente para hablar—... me siento muy nerviosa.

—Amor, ya te dije que no tienes porque temer, y si es por vergüenza, descuida; eres tan hermosa y tan perfecta que todavía me pregunto que hice para merecer algo así.

Mi corazón se derrite de inmediato. Sin embargo, digo:

—Amo tus palabras pero sabes que no podemos hacer esto aquí, si uno de los directivos nos atrapa estamos jodidas. —Mi voz es firme al igual que mis movimientos cuando apartó sus manos y logro separarme.

—Sí, y ya resolví eso —Cuando voy caminando mi bebé sigue mis pasos hasta mí, tomando mi mano—. ¿Te parece si nos encontramos en el hotel Rose Imperial este sábado?

Mis ojos se abren con asombró.

—Bebé, ese es un hotel nuy caro. ¿Cómo...?

—Un primo me hizo el favor —Dice y luego besa mi mano—. Mejor vamos a clases, ¿sí?

Asiento y mis pasos se aceleran.

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Sin corregir.

Si ven algunos detalles que no cuadran con la Luz de mis historias (como yo la veo desde mi punto de vista) es porque este pequeño libro es más una adaptación, así que verán algunas cosas raras que yo no suelo poner de ella, aparte de que su actitud es otra muy diferente a la que casi siempre uso con ella porque, bueno, es una adaptación.

Feliz noche.

Dedicado a AndrusAlvarado 🖤.