Sould Poems [Inspiración celestial]

Amado mio

   Oh, niño color canela, tan hermoso como el sol, tu belleza es tan extraña como la del girasol, esos ojos aperlados color del corazón y esa boca enigmática que tortura la razón.

   Grande y fuerte es mi amado como árbol bien plantado en las tierras del Señor, mi Rey le ha otorgado gracia y sabiduría como las de Salomón.

   Sus brazos fuertes ha extendido como un enviado de mi Dios pregonando el evangelio, anunciando salvación, con sus manos ha formado, con su pecho amoldó nuevas almas para el reino como Jesucristo enseñó.

   Sus piernas usa en adoración, con un amor sublime le ha danzado al señor, he hallado gracia en el el así como en David se halló, que habiendo sido humano y errando en alguna ocasión era el único llamado conforme al corazón de Dios.

   Como el líbano es mi amigo, como el manzano entre toda suerte de árboles silvestres, codiciable por todas las doncellas, por su delicada apariencia y su carácter fuerte.

   Como quien busca agua en el desierto, dulzura encontré en él, una ternura inimaginable también, muralla impenetrable que con cánticos derribe.

   Mi Señor me ha ordenado pacientemente esperar en él, mi Señor me ha mostrado lo que piensa hacer, así he hecho, he esperado y aguardaré, sus promesas, sus visiones con todo mi ser.

   Apresúrate amado mío, sé semejante al corzo, o como el cervatillo sobre los montes de beter.

Inspirado en Cantar de los Cantares.