Uno de Estos Días

Extra 2: Valentín, ¿por qué das y luego, quitas?

Toc, toc. ¿Estás ahí? ¿No te has escondido? ¿No has huido? ¿Ya has visto lo sucedido? Valentín, ser amoroso por doquier, repartiendo corazoncitos va él, siendo el mejor. Veo, veo a un particular amoroso con un abrazo gigante como las olas, amigo de Cupido. Algunos reprochando, algunos alabando a este ser que reparte alegría y amor.

Hoy 14 de febrero, estoy lleno de amor, de mi persona especial, que me abraza y acompaña. Mi mejor regalo, sin duda alguna, en este día es su sonrisa, sus caricias, sus alegrías. Una vida llena de recuerdos que vendrá por delante, por contar, una alegría y una gran hazaña. Hoy abrí los ojos y estaba contento a su lado, no me imaginaba las agonías que seguían.

Un año después, abrí el ojo y no era lo mismo, el abrazo se había ido, la soledad se aproximaba. Su mirada era otra, otra era su forma de hablar, todo había cambiado, todo se transformó. Todo era un hola, y luego, un adiós, todo disparaba la soledad y yo que la amaba. La calma había partido, la música se ha vuelto gris, nuestro amor a Valentín ya retornó.

El amor, sentimiento que va de hogar en hogar, y luego, se convierte en lo contrario. Si un día nos uniste, ¿qué fue lo que pasó? ¿Por qué ahora nos separas y nos haces sufrir? Después de tener una sonrisa y sonrojarme, hoy estamos distanciados a diario. Este amor como cristal, fino y delicado, apreciado, y ahora roto y que acaba de morir.

¿Qué fue lo que pasó aquí si éramos lo mejor? ¿En qué nos hemos convertido ahora? Volteo a ver y ellos riendo van, dando abrazos y besitos, ¿estarán actuando? Todo ha sido un shock, la ruptura ha terminado tan mal y ahora ella me ignora. Nuestro amor se ha ido, nuestro amor se ha vuelto al vacío, la tristeza se ha ido dibujando.

No paro de llorar, como si la lluvia hubiera usado mis ojos de préstamo para salir. A mí gran amor, el único que quería abrazar y atesorar, el ladrón me lo ha quitado. No paro de lamentar, ¿cómo dejé ir a lo que un día adoré?, nuestra historia ya se echó a dormir. ¿Cómo acabó todo así? Llorar, llorar y más llorar, nada más que eso, ha perdido el significado.

Gracias Valentín por habernos dado todo, todo, por habernos dado lo mejor, por todo el amor. No entiendo por qué nos quitaste lo nuestro, no te puedo echar la culpa, pero me siento mal. Valentín, ¿cuál tu cometido ha sido?¿Por qué diste y luego, quitaste? Valentín, todo un rumor.
Un día, con tarjetas y chocolates, el otro solo con una ruptura singular, de vuelta a lo normal.

Valentín, lo que un día iniciaste y abrazaste, ha llegado a su triste final.