Vuelta a casa

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New York , 05:30h

En la sala VIP del Aeropuerto John F.Kennedy  , se encontraba una colorada Carmen Mendoza ; pero , no por su pelirroja melena o por su piel de porcelana con leves tonos rojizos , sino por el coraje y el lloro que le traía recordar una vez más cómo su vida había cambiado en tan solo una semana.

A diferencia que en otras ocasiones , la benjamina de los Mendoza tenía ilusión de regresar a su tierra natal, a pesar de que no lo consideraba porque cómo decía su madrina era una ciudadana del mundo. 

Desde que tenía uso de memoria  , recordaba estar o pasar mayor tiempo de su vida en casa de su mejor amiga Carlota o en las habitaciones de distintos internados , qué en su propio país. Pero esta vez necesitaba reconectar consigo misma , y creer que volver a su linda tierra podía ser buen remedio para la peor enfermedad del mundo : el amor.

Y es que, al igual que su hermana mayor , el amor era lo que le había hecho pertenecer fuera de casa y asimismo era el desamor lo que le había impulsado volver a casa ; aunque , lo que le esperaba en su casa no sabía si realmente merecía la pena  como para impulsarle a continuar con esta decisión , tan solo era necesario recordarlo como para dudar de ello.

3 días atrás...

Tras una larga jornada laboral , una joven elegante se hacía camino entre la multitud de la gran manzana , dirigiéndose a su apartamento en Upper Manhattan.

Carmen nunca había amado los grandes lujos , al contrario de su querida madre y suegra , pero había sido un regalo de sus suegros por su compromiso ;  pero , por poder caerle un poco menos mal a su suegra hacía lo que fuera , e incluso convertirse en una de las frívolas hijas de las amigas de su madre.

A diferencia de otros días , no tenía ganas ni ninguna ilusión por llegar lo más temprano posible a su casa. Una sensación extraña corría en su interior , advirtiéndole del peligro o el mal que se avecinaba, pero que sabía que estaba apunto de avecinarse. 

 - Babe! I'm at home! . - mientras se cerraban las puertas del ascensor.El no encontrar a Henry en el salón le hacía despertar de nuevo sus alarmas , más aún los extraños sonidos que procedían de la planta de arriba.

 - Henry I just arrived - gritaba sin ser escuchada.

Se encaminaba a buscar a su prometido al dormitorio. Al subir por las escaleras , se acentuaban cada vez más los sonidos , o más bien los gemidos que procedían de la habitación , y que cuanto más se acercaba lograba identificar al menos una de las personas que se encontraban en este cuarto. 

Solo faltó abrir esa puerta para que la vida que había construido se derrumbara. - ¿Qué está pasando aquí?.- 

Su mundo se había destruido en tan solo un minuto , en 60 segundos la persona en la que había confiado en estos últimos años le había traicionado ni más ni menos que con su mejor amiga. La escena que tenía delante de ella era realmente impactante.

- Si Henry . - gimiendo su nombre mientras le cabalgaba

- Yeahhhhh honey.- Solo falto un segundo para que se diera cuenta de quien había abierto la puerta.- ¡¿Carmen?!.- mientras tirada fuera de la cama a Lilica.

 -Carmen te puedo explicar . - intentando cubrirse su cuerpo desnudo al mismo tiempo que se acercaba a ella , y le suplicaba.

-No me toques.- dando pasos hacia atrás , deseando salir de esa habitación.

-Venga Henry , ven aquí y acabamos. - al mismo tiempo que se reía.

- ¡CALLATE!. Te lo puedo explicar , no es lo que crees babe.- le suplicaba.

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⏰ Última actualización: Jul 16, 2023 ⏰

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