La pelinegra quien dejaba las bolsas de las compras en el suelo.
La mayoría de las bolsas era comida y nuevos juguetes para sus gatos quienes al instante se acercaron a ella para ronronear.
Mientras que luego su celular empezó a vibrar.
— Buenas memi – Un rubio saludo y la chica sonrió con ternura.
— Buenas acho —.
— ¿Qué hacías? — preguntó con curiosidad.
— Acabo de llegar de las compras, porque tus hijos no tenían comida, y les compré más juguetes — La chica dijo. Amaba comprarles juguetes nuevos, aunque siempre terminaban rotos o perdidos.
El rubio soltó una risita mientras que ella se recostaba en la cama.
— Hoy ha sido un día de mierda — La pelinegra soltó un suspiro.
— ¿que pasa? —.
— Nada pues, lo mismo de siempre, mi papá insultándome, y restregandome en cara que prefiere a mi hermana antes que a mi —.
— Lo siento Mel, ¿que hizo tu hermana? — preguntó el rubio.
— Disculparse y bla, bla, bla — Suspiro cansada. — Me estresa que siempre sea así, estuve llorando toda la mañana.
El rubio la vio con pena — ¿Qué te dijo tu padre Mel? —.
— ¿qué no me dijo? — La chica dijo con sarcasmo y rio con pena.
— ¿Quieres contarme? — El rubio preguntó, aunque pensaba que sus consejos no servirían de nada.
— Me siento pésimo, ¿por qué el si pudo ser el padre perfecto para mí hermana y para mí no?, me duele — La chica pauso, y trataba de no llorar. A veces su ascendente en cancer le jugaba una muy mala pasada. — La verdad es que yo también le dije cosas weonas, pero es que me las llevaba guardando mucho y ash, probablemente deje la caga — La chica suspiro.
— Ey memi, está todo bien ¿si?, le dijiste lo que sentías, y eso está bien. Siempre te trata mal, y la verdad que, me da alegría que le hayas dicho todas las cosas, me alegra en serio, por que se dará cuenta la mierda de persona que es — El rubio le sonrió tratando de apoyarla.
— Te quiero —.
[...]
— ¡VAMOOOS! — El rubio habló.
La chica quien cantaba lover a todo pulmón le sonrió.
— Ladies and gentlemen, will you please stand?, With every guitar string scar on my hand, I take this magnetic force of a man to be my lover, My heart's been borrowed and yours has been blue —.
El chico siguió la letra, en un idioma medio extraño, e hizo que la pelinegra soltara una carcajada — No sirvo para esto de verdad.
— ¡vamos, lo haces bien!, solo que le cambias la letra — La chica soltó una risita — Pero la intención es lo que cuenta — La chica pauso y empezó a dar saltitos — ¡Ahí viene! —.
— And ah, take me out, and take me home (forever and ever), You're my, my, my, my Oh, you're my, my, my, my. Darling, you're my, my, my, my, Lover — El chico quien sonreía al verla, aplaudió.
— ¡un grammy por favor! — Ambos rieron.
— Taylor mi reina — La chica quien dejó la escoba de lado, lo observó por la pantalla de su teléfono — Eres lindo — La chica susurro y el rubio se sonrojo.
— ¿Qué? —.
— Qué eres lindo, y se me hace muy lindo gesto que bailarás y cantarás lover conmigo — La chica sonrió.
— Es que eres la hostia, me gusta hablar y cantar contigo — La chica con una sonrisa gigante le hizo un corazón con los dedos.
[...]
— Axo, ya debes dormir — La pelinegra dijo al ver la hora.
— Nah — El rubio negó.
— Venga ya, mañana tienes que estudiar — Melissa hasta cierto punto parecía su madre.
— Nah — El rubio negó.
— Dejó de decir "nah" o te pego —.
— ¿Premio o castigo? —.
— Depende — Ambos soltaron una risita — A mi ya me dio sueño, te quiero acho, un besito en el lugar que quieras, gracias por hacerme sentir bien, buenas noches descansa —.
— Descansa Memi — Ambos colgaron y pronto le llegó una foto.
