~𝑱𝒖𝒏𝒈~

capítulo- 21

Me levanté y eran las 5 de la mañana, todo eso había pasado a las como a las 8 no recuerdo bien a que hora cai dormida así que tomé las pastillas y al fin tenía agua no se cuando o quien la dejó.

No podía dormir y no tenía nada más que hacer, solo miraba el reloj ya había pasado una hora, mi cabeza dolía un poco, pero no era insoportable como ayer.

Cuando dieron las 6:30 abrieron la puerta, pero nadie entró así que salí, estaba a nada de salir pero recordé que llevo una blusa delgada y no tengo sostén, no quiero que pase de nuevo lo se ayer.

Fui al enorme clóset y saque de ahí un brasier, todos estaban nuevos y todos me quedaban perfectos.

También vi más ropa y yo tomé un suéter blanco, no había pantalones solo faldas de tablas y vestidos en su mayoría rosa y blanco.

Hice una cara de asco ya que tengo frío no me apetecía usar eso, seguí buscando hasta que encontré un pans me lo puse y era a la cadera dando a ver mi cintura y mi ombligo, odiaba que se viera mi ombligo.

Salí de ahí con las manos envueltas en mi cuerpo tratando de tapar mi ombligo.

Cuando estaba saliendo me di cuenta que era todo un pasadizo que si un día mandaran a rescatarme sería casi imposible encontrarme, pero yo salía tranquilamente ya que todo estaba abierto y cuando pase la última puerta pude ver con más detenimiento donde estaba.

Estaba al final del pasillo como si fuera un bunquer.

Camine por los pasillos con la mano envuelta en el estómago y llegue al comedor, había varias personas arreglando la mesa, unas 3 o 4.

Iba a seguir mi camino cuando escucho uno voz.

- siéntate -

Gire mi cara y ahí estaba él, sentado en la cabecera de la meda con un celular en mano lo cual me brillaron los ojos, necesitaba su celular, me senté rápido cerca de él y mire su celular, pero lo apagó en cuanto me sente a su lado.

- parece que hoy eres más razonable y me obedeces -

No dije nada, me quere mirando su celular que descansaba en la mesa.

- ¿te tomaste tus pastillas? -

Asenti con la cabeza.

- para la otra no lo hagas si aún no has comido, luego te dará las mismas mierdas de tu madre por consumir pastillas en ayunas-

Lo mire desconcertada.

- No entiendo que tiene que ver -

Tomo un vaso de agua que le trajo una de las muchachas.

- tu mamá tiene cáncer esofago porque es una pura adicta a las pastillas y las consumía haciendo ayunos interminables y por estupida se esta muriendo-

- ¡de mi mamá no vas a estar hablando! -
Grite parandome de mi lugar.

- es la verdad, tu mamá es una maldita adicta a las pastillas que ya no sabia vivir sin ellas -

Tome el vaso que sostenía y le avente el vaso.

Solo pude mojarlo ya que por el enfado no pude atinarle.

Me miró furioso y yo salí corriendo, pero no fui muy rápida me tomo del cabello y comenzó a jalar de él.

Yo gritaba de dolor, dolia mucho y todos los ayudantes en la casa me miraban y sobre todo las señoras, me miraban con lástima y se secretiaban entre ellas.