—¡Hay que entrar a-aquí! -Ron hipó, llevaban varias horas bebiendo, desde que habían salido del trabajo. Celebrando el nuevo ascenso de Harry.
El pelirrojo señaló la entrada de un bar llamativo en el Londres Muggle, tenía un letrero neón y decía "Noche de Karaoke". Dean y Seamus estuvieron de acuerdo, y Neville, que era el menos ebrio de todos, también.
Sin embargo, James, la actual pareja de Harry, no parecía tan contento con el plan. Tironeó suavemente de su chaqueta y negó.
—No creo que sea buena idea. Harry, debemos ir a casa -el moreno hizo un puchero, mirándolo con ojos brillantes.
—Vamos, hombre, hay que celebrar las cosas buenas de la vida. Y hoy hay que celebrar el logro del muchacho -intervino Neville con una sonrisa ladina, miró a Harry con ternura. Ganándose una mala mirada de James.
El pelinegro rodó los ojos y bufó.
—¡Sí! No seas agua-¡hip!-aguafiestas -rió Ron con diversión, dirigiendose con los otros dos muchachos hacia el bar. Neville fue tras ellos, caminando tranquilamente. Desde la guerra, tenía un aura paternal bastante marcada. Pero le sentaba bien, de maravilla.
James tomó la mano de Harry para entrar, y Harry la soltó disimuladamente, sintiéndose poco cómodo con su tacto. Se adelantó un poco, llegando a la mesa con los demás.
James no le tomó importancia a su actitud extraña. De hecho, no lo hacía desde hace un par de meses. Y había dejado pasar por alto... Muchas cosas.
[. . .]
Ron bajó del escenario tras cantar y bailar Call me maybe lo suficientemente ebrio como para apenas poder sostenerse de pie. Su público río y le aplaudió por el espectáculo, y él volvió a su silla, riendo fuertemente.
Neville le dió una palmadita en el hombro, y Ron se dirigió a Harry.
—¡Es tu turno! -el moreno negó, tomando de su whisky escocés de un sorbo, y haciendo que James hiciera una mueca, alejando la botella.
—No haré el ridículo, Ron -rió Harry divertido, apenas podía ver bien. Su vista le hacía ver doble.
Definitivamente, ya estaba ebrio.
—Pero yo lo hice, lo justo es que tú también lo hagas.
—Tú siempre haces el ridículo -se burló Seamus, y Dean le dió un empujoncito a Harry, haciendo que se levantara de la silla. El ojiverde bufó y se dirigió tambaleante hacia el escenario, sus amigos silbaron, chiflaron y le vitorearon. James sólo se limitó a aplaudir suavemente, con una sonrisa divertida.
Harry, atontado como estaba, miró la lista de canciones y eligió una que llamó su atención.
Y que describía su situación.
Las luces empezaron a tornarse rosas y púrpuras, moviéndose aquí y allá mientras él tomaba el micrófono.
—Tengo un hombre, pero te quiero a ti. Tengo un hombre, pero te quiero a ti. Y son sólo los nervios, es sólo un pene lo que me hace pensar en otra persona. ¿Sabes? Tengo tanto por decir, trato que no se note en mi cara. Y no funciona, tú ves a través de ella que sólo quiero estar contigo. Y tienes razón...
Ron se reía bajo, mientras Dean y Seamus hacían un bailecito al ritmo de la canción. Neville lucía un poco más serio, y James frunció el ceño confundido.
—Tienes razón... Tengo a mi chico, pero yo... No puedo evitarlo, te quiero a ti. Dije que tienes razón, tengo a mi chico, pero yo-oh... No puedo evitarlo, te quiero a ti... -cerró los ojos un instante, antes de morderse el labio inferior, recordando los besos que justo la noche anterior alguien le había repartido con tanta ternura—. No puedo detenerme y mirar hacia otro lado, porque sé lo que podría ser, bebé... Y tú nunca sientes lo mismo. Te pones a pensar en ello todos los días; no creo en cuentos de hadas, pero tenemos nuestras fantasías. Y somos tú y yo, verás, intento estar bajo tus sábanas, en todas partes estarás encima de mí, actuando como si no fuera tan profundo. Chico, puedes sacarla de mí... Decirme qué podríamos llegar a ser... Realmente siento que está destinado a ser. No puedo contárselo a nadie, pero todos saben que... Tengo un hombre, pero te deseo a ti.
Harry entreabrió los labios ligeramente, cuando una voz le silenció al comenzar con la siguiente estrofa. Un reflector iluminó hacia el lugar del que provenía, y apoyado contra una pared, mirando fijamente al ojiverde, de encontraba un rubio de ojos plata que lo miraba con satisfacción.
—Chico, te deseo como tú me deseas a mí también... Siento esa energía cuando estás sobre mí. Conozco a tu hombre, él no te controla -Draco miró hacia la mesa del ojiverde con desdén, captando rápidamente a la pareja de éste. Hizo una mueca similar a las que hacía cuando algo le generaba asco, y Harry no podía dejar de mirarlo en un estado similar al shock—. Pero aún así dudas, porque elegiste la lealtad -rodó los ojos, separandose de la pared para empezar a caminar tranquilamente hacia él. Harry no podía dejar de mirarlo, y Draco tampoco tenía en mente despegarle la mirada—. Pero yo conozco tu historia, la conozco desde antes de que él apareciera cuando estabas en la cima. Está tan conectado con el muchacho inseguro que solías ser... Pero el sexo nublará tu memoria -su sonrisa arrogante apareció cuando llegó al escenario, se acercó a él, dejando a los espectadores mirar embobados la escena, con el micrófono en mano, se acercó apenas un poco más a Harry, y como si estuviera cantándole a él más que al público, terminó—: Un par de caricias y la pondré dentro de ti. Me pertenecerás a mí...
Un jadeo de sorpresa colectivo resonó, algunos vitores y las miradas impactadas de la escena. Harry no quería mirar a James, y sus ojos también se negaban a despegar la mirada de los ojos grises que brillaban por su causa.
Harry levantó el micrófono, y continuaron el dúo.
—Tengo un hombre, pero te quiero a ti. Tengo un hombre, pero te quiero a ti. Y son sólo los nervios, es sólo un pene, lo que me tiene pensado en alguien más... Sabes que tengo mucho por decir, trato de que no se note en mi rostro. Y no funciona, tú ves a través de ella que sólo quiero estar contigo... Y tienes razón. Tienes razón, tengo a mi chico... Pero yo, no puedo evitarlo, te quiero a ti.
—Dijiste que tengo razón...
—Tengo a mi chico... Pero no puedo evitarlo, te quiero a ti... -Draco apartó el micrófono de Harry, acercándose lo suficientemente como para suspirar sobre sus labios.
El moreno cerró los ojos debido a la cercanía, y Draco cerró por completo la distancia que le separaba para besarle con el mismo anhelo que la noche anterior.
Harry no notó que James ya no estaba, y que en su lugar, Pansy y Blaise se habían unido a la mesa. Que Seamus sacudía a Dean debido a la emoción, y que Ron no podía dejar de mirarlo por el shock de la situación.
Había admitido que le había sido infiel a su pareja. Pero más importante, había admitido, públicamente, que salía con Draco Malfoy.
Neville, aunque no lucía muy contento por sus acciones. Sabía que en ese estado no podría hacer mucho, así que esperaría para darle el regaño que merecía... Hasta entonces, no le quedaba de otra que compartir con él la felicidad que desbordaba.
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Primero que todo y antes que nada, recuerden amistades, NO ESTÁ BIEN LA INFIDELIDAD.
Usé la canción pq de verdad me fascina jshsjs, pero no normalicen ese tipo de actos. La responsabilidad afectiva es muy importante. <3
Hace muchísimo que no les escribía algo, irónicamente, tengo muchos borradores. Intentaré subirlos cada que pueda, lo prometo.
Y, también traigo un anuncio. Sí habrá historia de Tree, más estructurada, claramente. La portada está lista, aún estoy trabajando en la escritura, así que por favor, tenganme paciencia.
Espero hayan tenido un lindo San Valentín. Les quiere, Catt.💖
