The Night We Met (Shifting-The umbrella academy)

🍩𝑋𝑉𝐼𝐼𝐼. 𝐶𝑖𝑛𝑐𝑜 🍩

Klaus y yo permanecimos en su habitación, discutiendo en breves momentos por quién había tenido la culpa de que nos castigarán.

Además de hacia comentarios sarcásticos sobre Diego.

Tocaron la campana que anunciaba el momento de la cena, obviamente no bajamos.

-Tengo hambre Klaus -mencioné.

-No puedo hacer nada -contestó.

Me quedé callada.

-Tal vez si le dices a Dieguito nos traiga algo de cenar -dijo sarcástico.

-Ya dejalo, por la paz -respondí arta.

-Es que no es posible que lo hayas perdonado así de fácil -se quejó.

-Ni fue para tanto -

Pasaron al rededor de quince eternos minutos con Klaus explicando el porque Diego era imbécil y yo más por ser su amiga, obviamente no lo dijo así, pero lo dio a entender.

Tocaron a la puerta.

-¿Quién? -preguntó.

-Ben, abre tonto -contestó Ben del otro lado y Klaus abrió.

Que sea lo que pienso, que sea lo que pienso.

-Mamá me pidió que trajera esto pero no le digan a nadie que estuve aquí -explicó.

-Gracias Ben, me salvaste, tenía mucha hambre -agradeci.

Ben había traído una bandeja con fruta picada, un poco de yogurt con frutos secos y un emparedado partido a la mitad. Había dos tenedores pero era poca comida para dos personas.

-Tenias hambre, come -Klaus dijo mirando desde su cama.

-Pues ven, no voy a comer sola -contesté.

-Eso no va alcanzar come tú -

-Klaus... -dije mirándolo disgustada.

-Hablo enserio -

Tome la mitad del emparedado y se lo di en la boca -Ten come, ahorita te doy fruta -.

Klaus termino aceptando y comiéndose todo el Yogurt, igual no soy fan del yogurt.

-Bueno, tengo que irme, mañana tenemos entrenamiento y vamos a limpiar el Jardín -expliqué.

-¿Qué? Espera, Quédate conmigo esta noche -pidio.

-Klaus, mi cuarto ya está limpio y ya puedo dormir ahí -aclaré.

-¿Pediste tus sábanas? -preguntó.

-Si de hecho tengo tu manta en mi...-

-Ya está, vamos por ella -interrumpio y fuimos a mi habitación.

-Valla, me quedo muy lindo -mencionó al verla.

-Si, Grace me dio las cortinas -

Tomé la sábana, la acerqué a mi rostro y di un último respiró, tenía el aroma de Klaus impregnado. -Ten, gracias por prestarmela -la extendí en sus manos.

No me había molestado no tener sábanas, tenía la manta de Klaus y eso era mil veces mejor.

-Pero...-Klaus se detuvo, extendío la manta y me cubrió con ella.

-Klaus, me vas a tirar -grite. No podía ver absolutamente nada.

-Eres un burrito -dijo tirándome a la cama.

Me descubrí la cara y permanecí ahí, y el se sentó junto a mi.

Nos miramos unos segundos, quería guardar la imagen mental de Klaus sentado junto a mi mientras sonreía.