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Estuvimos hablando un rato hasta que nos empezo a dar sueño.

Carre se paro y estaba buscando algo su placard. Saco una remera y un pantalon corto.

- Toma para que duermas comoda- Dijo tendiendome su ropa, le sonrei en forma de agardecimiento.

Fui al baño y me cambien, su remera me quedaba super grande, el pantalon me quedaba casi abajo de las rodillas.

De todas formas a Rodri siempre lo veo con ropa más grande que él.

Sali del baño, fui a la pieza, él estaba con un pantalon corto y una remera grande también.

- Vos dormis aca en mi cama, y yo me voy a sillón- Dijo él, agarrando una almohada.

- No, durmamos juntos, si la cama es grande- Dije restandole importancia a lo que dije pero en realidad me salio sin querer.

- Bueno, no me voy negar- Dijo riendose, levanto la frazada para que me metiera dentro de la cama.

Apago todo para que la pieza quedara a oscura, solo entraba un poquito de luz por el borde de las persianas.

Me acoste, dandole la espalda, pero me terminé dando vuelta, él estaba con el celu mirando historias.

Justo aparecio la historia que Tiago nos habia etiquetado. Sonrió y me miro, me mostro la foto.

- La vi- Dije sonriendole, sentia el olor de su perfume, me re gusta.

- Me gusta, salimos re contentos- Dijo mientras reaccionaba a la historia con corazones.

Apago su celu y lo dejo en la mesita de luz, se acosto mirando hacia mi, los dos estábamos mirándonos en la oscuridad.

- Te estoy agarrando mucho cariño- Dijo él en un susurro, como si quisiera que nadie mas escuchara.

Me acerque hacia él y lo abrace, asi nos quedamos, después él me dio la espalda, nos dormimos haciendo cucharita prácticamente.

(...)

Me desperte con el sonido de mi celular sonando. Mire como pude quien me llamaba.

El nombre de Ger aparecia en la pantalla, atendi y me volvi a acostar.

- ¿Si?- Dije con voz rasposa, era obvio que se iba a dar cuenta que todavia estaba durmiendo.

- Samy ¿Donde estas?- Pregunto Ger con preocupación, pensé que se iba a rescatar que estoy donde Rodri.

- Estoy donde Rodrigo ¿Por?- Pregunte, no escuchaba nada en la casa, Barry estaba durmiendo en mis pies.

- Es que me preocupe porque no volviste ¿Vas a venir más rato?- Preguntó con tranquilidad.

- Eh... no sé, te aviso- Dije para que no me esperara, tengo que ver como me voy a volver.

- Bueno, nos vemos- Dijo y corto, me quede en silencio. Me senti un poco triste porque ya no tenia ese cariño hacia mi.

Resople y me levante, fui al baño e hice mis necesidades. Vi un cepillo de dientes con un cartel.

"Es nuevo, usalo tranqui <3"

Sonrei por el detalle, y feliz porque me iba a poder cepillar los dientes.

Una vez termine con eso, fui al living y no estaba, pero justo escuche la puerta abrirse.

- Buen dia- Dijo feliz, traía bolsas, supongo que habia ido a hacer las compras.

- Hola, buen dia- Dije mientras me acercaba a ayudarlo con las bolsas.

- Fui a hacer las compras asi cocinamos algo para comer- Dijo contento, empezo a sacar las cosas, vi unos capelettinis que me tentaron.

- Uh que rico- Dije mirando el paquete, se rio, y me mostro cuatro paquetes más.

- A Spreen le encantan igual, son re ricos- Dijo como si se los saboreara, me rei ante su gesto.

Cocinamos entre risa, porque somos un poco torpes en la cocina, pero al final salieron re ricos.

Estabamos comiendo, hablando de nuestras vidas, conociendonos un poco más.

- Eu Samy te iba a preguntar algo, lo estuve pensando mientras hacia las compras- Dijo mientras tomaba un poco de gaseosa para tragar los capelettinis.

- Si decime- Dije mientras revolvía la pasta, levante la vista encontandome con sus ojos claros.

- ¿Y si te venis a quedar aca? asi Uni esta con Manu y arreglan sus mambos- Dijo casi que con miedo, me miraba espectante a mi respuesta.

Mi Salvación - Rodrigo CarreraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora