FlintWood headcanons

Why Judy Why - One Shot

Verano 1979

Los lugares muggles, no son lugares que normalmente recurre un mago de sangre pura que desde su infancia se ha visto la magia como algo normal, aprendiendo de su casa sobre toda las cosas.

La enseñanza que a uno le dan dependiendo la familia puede variar de tomar esos lugares como lugares normales a los que simplemente hay que ir con cuidado para que no te capten haciendo magia o en el peor de los casos como lugares que no debes pisar en tu vida para manchar el pulcro nombre de tu familia, eso juntandolo con el hecho de que nunca debes hablar con un muggle ya que son seres inferiores e despreciables.

A pesar de haber crecido con la segunda educación, cierta heredera pelinegra de no más de unos 25 años caminaba tranquilamente por las calles que después de un tiempo ya podia llamarlas un tanto conocidas, llevaba su cabello suelto con un sombrero como si quisiera no ser identificada por nadie, dando un aire prepotente y de clase.

Junto a ella la acompañaba un niño pequeño que iba agarrado de la mano de la mayor tratando de seguirle el paso un poco complicado, y tropezando con algo la otra al ver esto se detuvo para sostenerlo antes de que cayera, este la miro haciéndole un puchero a su madre y la pelinegra solo sonrió revolver su cabello agachándose un poco a su estatura.

- Recuerdas lo que te dije Marc?.- Le preguntaba Eleanore Shafiq o mejor dicho ahora Flint a su hijo, mientras acomodaba sus ropas nuevamente.

- No decirle a papá o a los abuelos.- Dijo de mala gana el menor repitiendo lo que le había dicho si madre durante todo el tiempo desde que salieron d ella mansión para bajar su mirada.

Eleanore sonrió para decirle un "muy bien", para levantarse y volverá a caminar junto con el mientras pasaban por lo locales de la calle, la caminata no duró mucho más cuando llegaron a un pequeña cafetería, no era tan temprano pero tampoco tan tarde por lo que algunas mesas de afuera se encontraban ocupadas con parejas, a lado de la entrada había un pequeño letrero escrito a mano que decía Bienvenidos junto con parte del menu que ya conocía muy bien la heredera y una que otra cosa especial por el día de hoy, la ex capitana miro a su hijo que no se sintió muy cómodo al lugar nuevo y se pegó mucho más a su madre para entrar al local, la campana de la puerta sonó y el olor tan peculiar a café recién hecho tranquilizó a la mujer trayendo le muchos recuerdos.

Una chica muggle de la barra que Eleanore podía distinguir como Sarah les dió la bienvenida amigablemente para señalarle a la igual conocida clienta una mesa que se encontraba un poco distante de las demas tomando en cuenta el pequeño negocio, la pelinegroa camino hasta lo señalado viendo a dos clientes que se encontraban adentro del local y que parecían ser más que nada estudiantes al punto de un colapso nervioso.

Llegó a una mesa donde se encontraba una chica con gafas, su cabello era a igual oscuro solo que corto y algo alborotado, tenía dos pequeñas trenzas que caía cada una a lado de su rostro, está fruncía el ceño mientras escribía en lo que parecía ser en un periódico, la heredera Shafiq se acercó mirando a la otra que la volteo a ver de reojo.

- ¿Oponer razones uno contra el otro?.- Le pregunto la de gafas y Eleanore se quedó pensando por un momento.

- Debatir?.- La chica regreso su vista al periódico para contra los cuadros y asentir para escribir la palabra.

- Eso es algo que estás acostumbrada a hacer.- Eleanore se negó divertida para sentarse en frente de ella no si antes poner al menor en el asiento que quedaba a lado de las dos chicas y que daba hacia la vista de toda la cafetería.

La Gryffindor dejo el crucigrama guardando lo en su bolsa, era muy mala en esas cosas pero solo compro el periódico para perder el tiempo en lo que llegaba la pelinegra y para colmo tuvo que pedir un lápiz prestado de uno de los clientes, Hartlow se acomodo sus gafas para mirar a su amiga y hacer una mueca.